
La compra del chalé de lujo en la sierra de Madrid por parte de Pablo Iglesias, a través de una hipoteca de 540.000 euros a 30 años con Caja de Ingenieros, ha coronado al secretario general de Podemos como el líder de un partido político en España con la mayor cuantía hipotecaria.
El número uno de la formación morada ha superado ampliamente con esta operación de endeudamiento a los otros dos líderes de partidos políticos que mantienen cargas hipotecarias por sus viviendas: Albert Rivera y Pedro Sánchez. El presidente del Gobierno y líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, no tiene actualmente ninguna hipoteca por los cuatro pisos que posee; al igual que el líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, que vive de alquiler y es diputado en el Congreso desde 2011.
Los 540.000 euros de la hipoteca conjunta de Pablo Iglesias y su pareja Irene Montero es mayor que los dos préstamos que tiene el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, por los dos pisos de su propiedad -al 50 por ciento- en Barcelona. Las dos hipotecas de Rivera suman un total de 471.500 euros. La primera de ellas fue concedida en 2004, por un importe de 165.500 euros, de los que Rivera ya ha abonado 107.000 euros, a fecha de julio de 2016, últimos datos comunicados al Congreso de los Diputados. La otra hipoteca del líder de Ciudadanos, de 2008, asciende a 306.000 euros, de los que ya ha pagado 254.800 euros hasta 2016. Por lo tanto, Albert Rivera mantiene una carga hipotecaria actualmente de 109.700 euros. En Madrid vive de alquiler.
Por su parte, el líder de PSOE, Pedro Sánchez -casado en separación de bienes- tiene concedido desde 2008 un préstamo hipotecario de Bankia por importe de 159.300 euros, del que a fecha de diciembre de 2017, el político socialista ha abonado 54.866 euros, por lo que aún le resta de pagar otros 104.434 euros. El líder del PSOE es dueño de dos viviendas con plaza de garaje en Madrid. Una de ellas, con un valor catastral de 91.822 euros, la comparte con su esposa, y la otra es de 88.970 euros.
Por último, y tal y como consta en su declaración de bienes de 2016, Alberto Garzón, coordinador federa del Izquierda Unida, tiene dos viviendas y un aparcamiento en la localidad malagueña de Rincón de la Victoria; una al 25 por ciento y otra al 50 por ciento, fruto de una herencia familiar.
Un colchón de 100.000 euros
Garzón, que cobra unos 4.600 euros al mes como diputado, de los que abona parte a su partido, declaró en 2016 tener unos 62.000 euros en depósito. Una cifra inferior a la declarada por Pablo Iglesias que, tras su éxito como tertuliano y su paso por el Parlamento Europeo con un sueldo de 80.000 euros, acumuló unos ahorros de 125.000 euros, que según el propio político usó para pagar la entrada y las reformas del chalé de 268 metros cuadrados de La Navata. "Hace dos semanas él (por Pablo Iglesias) tenía muchos ahorros; ahora mu-chos menos y una deuda de 30 años", aseguraron los líderes de Podemos en un comunicado en el que han tratado de explicar a sus bases la compra del chalé de más de 600.000 euros.
En esta línea, según consta en la declaraciones de bienes presentada por Iglesias en el Congreso el pasado 11 de mayo, es decir, tras la compra de la vivienda unifamiliar, el líder de izquierdas atesora unos 100.000 euros entre cuentas de ahorro y corrientes. En la actualización de la declaración de bienes, Iglesias reconoce un salario anual de 41.211 euros por presentar programas (La Tuerka y Fort Apache) y otro de 48.748 euros como diputado, de lo que dona parte al partido. Por su parte, Irene Montero ha publicado unos ahorros de 38.000 euros, frente a los 22.000 declarados cuando fue nombrada diputada. Ella ha declarado unos ingresos de 83.291 euros, de los que más de la mitad tienen que ir a las arcas del partido morado.
Pese a que los líderes han insistido en que se han ido a vivir al campo para alejarse de "los paparazzi" y "poder avanzar con sus proyectos personales", la decisión ha abierto un cisma en el seno de Podemos. Tras la defensa de Juan Carlos Monedero, el alcalde de Cádiz, Kichi, ha criticado públicamente la decisión de los líderes de abandonar sus barrios y comprar una vivienda en el campo. "El código ético de Podemos no es una formalidad", sino "el compromiso de vivir como la gente corriente para poder representarla en las instituciones y supone renunciar a privilegios como el exceso de sueldo", aseguró ayer el líder andaluz.
"No es la donación en sí misma, es no parecernos a la casta, es no ser como ellos", apuntó Kichi, que criticó abiertamente que Iglesias "acumule riqueza" y logre una hipoteca que triplica el préstamo medio concedido en Madrid para la compra de una vivienda.