
La canciller de Alemania denuncia que hay sectores industriales que presionan para que se cierren acuerdos a la carta con Reino Unido antes de iniciarse las negociaciones oficiales con la Unión Europea. En concreto, apunta a los fabricantes de vehículos que buscan tener abierto el mercado británico a cambio de que las entidades financieras tengan acceso al mercado único.
Angela Merkel es inflexible para salirse de la hoja de ruta que marca la salida del Reino Unido de la Unión Europea. La canciller es la principal valedora de los políticos europeos de activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa para comenzar a negociar la ruptura con el conjunto de los países, sin que haya oportunidades de un Brexit a la carta. También se opone a acuerdos sectoriales entre industrias.
Según Bloomberg, Merkel ha advertido a diputados germanos de que varias industrias presionan para cerrar acuerdos sectoriales entre las Islas y el Viejo Continente, antes de formalizarse las negociaciones entre los países miembros de la Unión Europea y Reino Unido.
La canciller denuncia directamente a los fabricantes de coches europeos que quieren tener abierto el mercado británico, a cambio de que los bancos del Reino Unido mantengan el acceso a la Europa continental, según fuentes presentes en la reunión que cita la agencia de comunicación.
El Gobierno alemán teme que la premier Theresa May intente buscar acuerdos sectoriales para evitar negociar un acuerdo global con los 27. Merkel ya ha dado orden a sus ministerios que eviten contactos diplomáticos con sus homólogos británicos. Un mensaje que también ha lanzado al resto socios europeos, en línea con el ejecutivo comunitario, en un intento de bloquear acuerdo bilaterales.
Un portavoz del Gobierno alemán ha afirmado al medio estadounidense que la posición de Berlín es inalterable desde que se aprobó el Brexit en referéndum. "Reino Unido debe aceptar la libre circulación de personas, capitales, bienes y servicios de la UE para mantener el pleno acceso al mercado único", afirmó.
El Gobierno de May puso de relieve la importancia de la industria automovilística en el país tras convencer a Nissan de que mantuviera la producción en Sunderland, ofreciendo apoyo a sus plantas para atraer inversores.
El Reino Unido se juega con sector miles de empleos y millones de inversión, pero todavía es más importante que el comercio con Europa siga abierto para la industria alemana.
El Reino Unido produjo 1,59 millones de vehículos de turismos en 2015, incluyendo marcas como Nissan, Jaguar, Toyota o Mini y. La industria británica es cinco veces menor a la germana que generó 5,5 millones de unidades en 2015. Gran parte de la producción teutona va directa a Reino Unido. Según la patronal de fabricantes, se venderán 2,4 millones de unidades en 2017. La cifra será un 8% inferior a este año por la depreciación de la libra.