
La reforma a nivel asistencial de los subsidios por desempleo conllevó mejoras en las cuantías de estas ayudas que se destinan todos los meses a cientos de miles de beneficiarios. Incrementos que, con todo, son temporales y no duran hasta el final del cobro de la prestación.
Así, el SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal) quita porcentajes de la cuantía de algunos subsidios por desempleo a partir de ciertas fechas de cobro, es decir, cuando pasan varios meses percibiendo estas ayudas. Al final, regresa a su cuantía habitual, la de antes de la reforma.
Todo aparece recogido en el Real Decreto Ley 2/2024, de 21 de mayo (puede consultarlo en este enlace), que informa de que "se modifica la cuantía de los subsidios por agotamiento y de cotizaciones insuficientes, introduciendo una fórmula de cuantía decreciente, en tres tramos".
Este incremento no aplica al subsidio para mayores de 52 años, ya que este subsidio presenta una ventaja adicional que finalmente se mantuvo tras la reforma: a diferencia del resto, conlleva cotizaciones de cara a la jubilación durante el periodo íntegro de su cobro.
En la página web del SEPE quedan recogidas las cantidades del subsidio, que irán reduciéndose de forma paulatina según avance el tiempo:
- Es del 95% del IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples) durante los primeros 180 días: 570 euros mensuales.
- Es del 90% del IPREM del día 181 al 360 de cobro: 540 euros mensuales.
- Es del 80 del IPREM a partir del día 361 de cobro: 480 euros mensuales.
Así, tras los primeros seis meses el subsidio desciende de 570 a 540 euros, una bajada de algo más del 5%. Posteriormente, cuando se llega al segundo año de cobro, el subsidio pasa de 540 a 480 euros, una bajada algo más significativa, de un poco más del 11%.
En total, la cuantía a partir de la segunda bajada, si se compara con la inicial, supone un descenso de 90 euros mensuales, más de un 15% del total que se percibe al inicio del cobro de la prestación.
Con todo, el beneficiario de los subsidios debe tener en cuenta que, de no haberse aplicado este incremento, aunque gradual y descendente, habría cobrado menos dinero con una cantidad estable y única de 480 euros mensuales.