En la premura y la confusión en que se están moviendo las cosas con el coronavirus, los agentes sociales se quedaron sorprendidos ayer de que no se aprobase la medida estrella: una modificación temporal y de carácter excepcional de las fórmulas para la aprobación de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).
Tanto es así, que el Ministerio de Trabajo ha convocado esta mañana de urgencia la mesa de diálogo social abierta para la reforma laboral, con el fin de cerrar un acuerdo. Y en esta ocasión, la reunión del Ministerio de Trabajo con los segundos niveles de los agentes sociales no ha sido telemática sino testimonial, a pesar de que había sido suspendida hace unos días para evitar posibles contagios. Todo apunta, según fuentes conocedoras de la negociación, de que la modificación se aprobaría en el próximo Consejo de Ministros del martes como tarde.
La sorpresa por la exclusión de la medida de los ERTE ha llegado incluso al enfado, si se tiene en cuenta que los agentes sociales forzaron una negociación, con reuniones hasta altas horas de la noche, para cerrar un documento conjunto de las organizaciones sindicales y empresariales que incluía una propuesta detallada, y consensuada, para abordar los cambios legislativos necesarios para poner en marcha, cuanto antes, una herramienta que se considera imprescindible para evitar los cierres definitivos de empresas y el despido de sus trabajadores.
De hecho, el sector turístico, a través de Exceltur, la Alianza que agrupa a todos los sectores, se mostró especialmente decepcionada por no haber aprobado tal medida.
El cambio de los planes del Gobierno, que en principio se iba a reunir con los agentes sociales ayer jueves antes del Consejo Extraordinario de Ministros, ha podido influir en el retraso de la medida. No obstante, fuentes de los agentes sociales apuntan que el tema se había debatido anteriormente.
El Gobierno ya había mantenido días atrás una reunión en la misma mesa que se ha reunido esta mañana en la que se debatió esta medida, conjuntamente con la decisión de que las bajas de los trabajadores afectados, o aquellos que estén en cuarentena, como accidentes laborales.
Sin embargo, mientras que está última medida ya ha sido aprobada, sin necesidad de pasar por Consejo de Ministros, la de los ERTE queda todavía pendiente a pesar de que ya se ha convocado una reunión ministerial, preceptiva para aprobar el Real Decreto que lo debe amparar.