Madrid
El año 2022 está llamando a las puertas. Tras la pandemia de la Covid-19, hacer propósitos a largo plazo es cada vez más difícil ya que el virus es impredecible y eso complica mucho las cosas. Pero lo que sí ha acelerado la pandemia ha sido la transformación del mercado laboral. Por ejemplo, en Estados Unidos se está viviendo un fenómeno de abandono masivo de los puestos de trabajo que rara vez se había visto en su mercado laboral.
Es cierto que en Europa, ese fenómeno es menos notorio pero, con la pandemia, sí que se aprecia un sentimiento de cambio de vida. Un cambio en el que lo laboral juega un papel fundamental en ese vuelco de vida.
Los cambios y los propósitos son algo que debemos pensar fríamente y reflexionar y, sobre todo, si es en lo laboral. Pueden dar miedo al principio y, sobre todo, si tenemos cierta edad en la que es posible que nos podamos quedar fuera del mercado labora, como sucede en España. Pero los cambios son posibles y aquí te enseñamos diferentes recomendaciones de lo que debes hacer para tu cambio de vida.
Mejora tu perfil
La globalización y la tecnología han acortado distancias y han abierto mentalidades. Esto implica que la rotación empresarial se acentúe y que tanto empleados como empleadores tengan que pensar cómo hacer frente a nuevos modelos empresariales.
Esto ha llevado a que candidatos de todas las edades a reinventarse constantemente y adquirir nuevas habilidades explorando términos como la "empleabilidad" o la "marca personal" y familiarizarse con la digitalización.
Por tanto, el desarrollo profesional está muy presente y con él el empleado busca su satisfacción y felicidad en un puesto de trabajo en el que sentirse realizado.
La pregunta está en el aire ¿Cómo puedo mejorar mi desarrollo profesional?
Antes de nada hay que identificar nuestros logros y resultados obtenidos durante nuestra trayectoria profesional y luego llevar adelante los siguientes puntos.
1. Identifica tus habilidades y capacidades: Debes saber dónde brillas más, por ejemplo, trabajo en equipo, liderando, o encontrando soluciones creativas, puede ser la clave que necesitas para ser justo lo que buscan las empresas.
2. Desarrolla tus habilidades humanas: Gestión del tiempo, gestión del conflicto o la conocida como resiliencia pueden ser de gran interés para las empresas.
3. Pon tu currículum al día: Si te puede la pereza y vas dejándolo pasar, plantéate que ese año de experiencia o ese trabajo específico pueden ser más interesantes de lo que crees para el personal de recursos humanos de la empresa de tus sueños.
4. Pequeñas y grandes habilidades: De cara a tus expectativas de futuro y fu motivación, considera nuevos métodos para formarte que abarquen retos pequeños, como cursos, seminarios, etc. o grandes desafíos que valorarán mucho más las empresas como aprender otro idioma, programación, estudiar un ciclo, una carrera o un máster.
Esto sirve para cualquier persona que esté en búsqueda de ese cambio laboral soñado y seguramente para una persona de entre 20 y 30 años esto le sirva de gran ayuda, pero ¿y qué pasa con la gente de 40? Pues aquí te lo contamos.
Cambiar de trabajo a los 40
Si sientes la necesidad de cambiar de trabajo, lo primero es revisar regularmente nuevas ofertas de trabajo.
Date de alta en diferentes webs de búsqueda de empleo en las que podrás generar alertas en base a tus intereses personales y profesionales. Eso sí, es importante que sepas que un cambio laboral puede influir en tu estilo y ritmo de vida. Por tanto, si aún no tienes claro cuál es el trabajo de tus sueños, pero deseas mantener una estabilidad y seguridad económica, quizás te interese formarte en alguna de las mejores carreras para mayores de 40 años: Front-end engineer, Marketing, Data scientist, Profesor, Vendedor, Contratista, Event planner y Traductor.
Si no es ninguna de estas, pero tienes claro cuál es tu profesión ideal para ese cambio de vida, es momento que te informes y busques las habilidades o requisitos necesarios para conseguir ese puesto que quieres.
Una vez tengamos esto tachado en nuestra lista, es el momento de prepararnos para enfrentarnos a este nuevo mercado laboral que, en los últimos años, ha dado un gran cambio y, con él, también los procesos de selección. Por tanto, es importante una deconstrucción en cuanto a la actitud y la estrategia. A la hora de aplicar a un nuevo puesto, las dos herramientas que más nos van a ayudar son: el currículum vitae y la entrevista.
Con un buen CV es más fácil acceder a una entrevista de trabajo. Por eso es importante que antes de postular lo revises y lo adecúes al puesto que te interesa. Es de gran ayuda traducir las habilidades en resultados tangibles, logros específicos y metas alcanzables. Dedícale tiempo y paciencia a este primer filtro.
Una vez llegue el momento de hacer la entrevista, es importante la confianza y la seguridad en uno mismo. La veteranía tendrá que transformarse en valor añadido y la experiencia como una oportunidad para quien te contrate.
Por último, otra de las herramientas que te van a ayudar es tu red de contactos. Es cierto que hay muchas compañías que usan páginas web, medios tradicionales y redes sociales pero, en muchas ocasiones, a la hora de cubrir una vacante suelen buscar a través de conocidos de la propia empresa o de sus trabajadores. Por ello, el networking es uno de los métodos más utilizados y exitosos a la hora de encontrar trabajo.
Por tanto, no olvides tu red de contactos. Tu objetivo es cambiar de carrera profesional, y nunca sabes quién puede ser la persona que te ayude a crecer o te recomiende para una vacante. Es importante que no te limites a tu sector, valora todos tus contactos, pero sin ser oportunista. Es muy importante que no contactes solo cuando necesitas algo de esa persona, porque eso no es tejer tu red de contactos. Las relaciones han de ser frecuentes y directas.
En conclusión, crecer profesionalmente o hacer un cambio de vida implica constancia y perseverancia. Es necesario reinventarse y salir de nuestra zona de confort para aprender nuevas habilidades.
No dejes pasar la oportunidad de ampliar tu trayectoria profesional, de conocer gente con la que aprender cosas nuevas y de encontrar la satisfacción laboral para invertir tu energía y tu tiempo en algo que de verdad te guste. 