La Ley Hipotecaria "es una noma orientada a la consecución de dos objetivos concretos: colaborar y coordinar las administraciones públicas y ser instrumento de protección al servicio del ciudadano".
Para Jesús Sieira, censor interventor del Colegio de Registradores, esos son los motivos de que la norma siga gozando de vigencia y modernidad a pesar de ser veterana. A su juicio, el texto hipotecario "no sólo es presente, sino también futuro".