Las comarcas de Tierra de Barros y Zafra-Río Bodión, en pleno corazón de la provincia de Badajoz, son una sucesión de ecosistemas, desde la dehesa a las grandes extensiones de viñedos, desde las llanuras cerealistas a los complejos lagunares. Aquí lanzamos 10 motivos para adentrarse en esta tierra con solera, bien conocida como la Ribera del Guadiana, por la ruta de sus vinos, por su exquisito jamón ibérico y también por un legado histórico que sabe mucho de aventuras y conquistas.
1.- Visitar un yacimiento arqueológico de la Edad del Cobre: Huerta Montero
La localidad de Almendralejo atesora uno de los yacimientos arqueológicos más atractivos y sorprendentes de Extremadura. Un sepulcro prehistórico, de más de 4.000 años de antigüedad. El hallazgo lo hizo un agricultor en 1988, mientras labraba las tierras. Lo que más sorprende de este enterramiento es su fuerte carácter simbólico. Está construido orientado hacia el este, y los días 21 y 22 de diciembre, coincidiendo con el solsticio de invierno, los rayos del sol penetran hasta el interior de la cámara funeraria.
Para los verdaderos amantes de la arqueología, también recomendamos acercarse a los yacimientos de Fornacis (Hornachuelos) en Ribera del Fresno (a 26 kilómetros de Almendralejo) y de Ugultuniacum (Contributa Iulia), en Medina de las Torres (a 11 kilómetros de Zafra).
2.- Tapear en 25 bares y restaurantes históricos de Zafra
La localidad de Zafra posee un buen número de establecimientos que están ubicados en edificios de importancia histórica, lo que supone un importante atractivo para la visita de esta localidad que en 1965 fue declarada como conjunto histórico-artístico. En la ciudad podrás degustar exquisitas tapas, incluso entre paredes que son restos de la antigua muralla de Zafra, como es el caso del restaurante La Marquesa.
3.- Señorío de Feria
Pernoctar en un sitio que antaño tenía carácter nobiliario, como el Parador Nacional de Turismo de Zafra, hace que el viajero quede boquiabierto al entrar en su monumental patio central de carácter renacentista. Esta fue la residencia de los Duques de Feria, cuya construcción se inició en 1437. Este castillo-palacio, cuyos torreones y almenas pueden ser visitados, traslada al viajero a una época en la que los ritmos eran menos ajetreados que los de nuestra sociedad actual.
4-. Subir al "Faro de Extremadura"
De planta cuadrada y esquinas redondeadas, desde la impresionante Torre del Homenaje del castillo de Feria se puede divisar media provincia de Badajoz, de ahí el nombre con el que suelen llamar a esta fortaleza. En el interior del castillo se encuentra el Centro de Interpretación del Señorío de Feria, museo dedicado a la familia Suárez de Figueroa, una de las más poderosas de la época de la Reconquista en Extremadura.
5.- Senderismo por las tierras moriscas de Hornachos
El pueblo de Hornachos, enclavado a los pies de la Sierra Grande Hornachos, hunde sus raíces en la cultura agrícola y comercial de los moriscos que habitaron en ella hasta 1609-1610, cuando tuvieron que abandonarlo obligados por el bando de expulsión dictado por el rey Felipe III. Convertidos en piratas, fundaron la República de Salé, al lado de la actual Rabat. Su impronta puede adivinarse si hacemos una ruta por los bellos paisajes de la Sierra Grande de Hornachos y si visitamos el Centro de Interpretación de la Cultura Morisca.
Sierra Grande de Hornachos, de gran valor paisajístico.
6.- Museo del Vino Almendralejo
Durante tu viaje por la Ribera del Guadiana, el vino hará de hilo conductor y estará presente a cada paso. Una veintena de municipios de Badajoz conforman la Ruta del Vino Ribera del Guadiana, un recorrido único para conocer la cultura del vino en esta tierra, gracias a numerosas actividades como catas, visita de bodegas, maridaje de platos con productos extremeños o incluso un baño de vino en el Balneario El Raposo. Para entender todo lo que rodea la cultura del vino será buena idea visitar el Museo del Vino en Almendralejo, donde confluyen historia y tradición.
Ruta del Vino Ribera del Guadiana
7.- Vivir la riqueza literaria
El turismo literario también tiene cabida en la Ribera del Guadiana. En Almendralejo nacieron dos poetas románticos coetáneos, como fueron Carolina Coronado y José de Espronceda. De allí era la familia de la novelista Dulce Chacón, aunque la autora de La voz dormida, nació en Zafra, en el edificio que actualmente ocupa el hotel y restaurante Plaza Grande. En Ribera del Fresno nació Juan Meléndez Valdés y es en el municipio de Torremejía donde Camilo José Cela ambienta La Familia de Pascual Duarte.
8.- Jamón ibérico, placer para los sentidos
Dentro de la amplia oferta gastronómica de la zona, en la que no faltan las migas, los arroces con caza, el cojondongo (ensalada básicamente de pimientos, tomates y cebolla), los repápalos o los huevos al alcalde de La Albuera; sobresalen todos los productos derivados del cerdo ibérico y, en especial, el jamón ibérico de bellota, auténtica estrella culinaria de nivel mundial.
Degustarlo en cualquiera de los múltiples rincones con encanto que ofrece la geografía de las comarcas de Tierra de Barros y Zafra-Río Bodión, es un auténtico placer al que no se debe renunciarse.
9. Viajar en el tiempo. Tú elijes: templarios, santiaguistas, romanos
En Extremadura aún hoy están delimitados antiguos tramos de la famosa Vía de la Plata. Antigua calzada romana que vertebraba el occidente español, desde Mérida hasta Astorga. Durante la Edad Media, templarios y santiaguistas jugaron un papel importantísimo en la defensa del sur de Extremadura. Su presencia se puede encontrar en sitios como Burguillos del Cerro, Los Santos de Maimona y Fuente del Maestre. Por su ubicación, en la Iglesia de San Juan Bautista, a los pies del imponente Castillo de Burguillos del Cerro, y por su contenido, merece especial atención el Centro de Interpretación de la Orden del Temple.
10.- Fiestas con historia
Durante la primavera y el verano, el ambiente festivo inunda cada localidad de Tierra de Barros y Zafra-Río Bodión. Desde abril hasta julio, prácticamente todos los fines de semana hay una fiesta que tiene, como denominador común, un trasfondo histórico y patrimonial. Podemos presenciar diversas recreaciones históricas, como la Batalla de la Albuera, la Ruta Literaria del Romanticismo, de Almendralejo; la época romana en Contributa Lúdica, en Medina de las Torres; o la presencia morisca en Hornachos.