Ahora que se habla tanto de la responsabilidad social empresarial o corporativa (RSE o RSC), podríamos decir que los productos de proximidad son productos responsables y sostenibles en sí mismos. Se trata de productos de temporada, producidos o cultivados en zonas cercanas a donde se van a vender y un ejemplo claro lo tenemos con las frutas y hortalizas, aunque también hay muchos otros. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Comunitat Valenciana
Son sostenibles desde el punto de vista económico, porque los productos de temporada tienen un precio asequible, ya que, normalmente, la oferta suele estar equilibrada con la demanda. Además, están en su momento óptimo de maduración, con todas las cualidades organolépticas de frescura y calidad.
Pero no nos podemos olvidar de la sostenibilidad en su vertiente social y laboral de los productos de proximidad. Apostar por los productos de temporada supone estimular el desarrollo económico local, a través del uso de recursos de los territorios donde se va a vender el producto. En nuestro caso, donde estamos implantados comercialmente -Comunidad Valenciana, Cataluña, Aragón, Murcia, Castilla-La Mancha y Andalucía-, las empresas del territorio se ven favorecidas y pueden generar nuevos puestos de trabajo. Por eso, en Consum, el 99,6% de nuestras compras se realizan a proveedores nacionales y el 65% son de las comunidades autónomas en las que estamos presentes.
Sostenibilidad medioambiental
Los productos de proximidad también son sostenibles desde el punto de vista medioambiental, porque su producción se realiza cerca de los lugares donde van a venderse, hecho que revierte en un menor consumo energético en el combustible del transporte desde el origen al punto de venta, menores emisiones de CO2 a la atmósfera y la consecuente disminución de la huella de carbono. Además, al hacer menos kilómetros y tener menos costes, tienen un mejor precio.
En el caso de Consum, más del 95% de los proveedores de productos frescos y refrigerados de marca propia cuentan con certificaciones de calidad, que garantizan el respeto del medio ambiente y la seguridad alimentaria, cuestiones prioritarias para nosotros como empresa socialmente responsable.
Además, para garantizar la cadena de suministro de los productos desde el origen hasta los supermercados, contamos con el programa de transporte en origen (TEO). Éste consiste en recoger y entregar las mercancías directamente del proveedor a cada una de las plataformas logísticas de la Cooperativa en Valencia, Murcia y Barcelona, en lugar de que cada fabricante haga su entrega. Así, reducimos el tiempo de entrega, garantizando la cadena de frío para los productos frescos, refrigerados y congelados, y optimizando los procesos y costes logísticos.
A este proyecto ya se han sumado 132 proveedores de productos de las secciones de frutas, carne, pescado, charcutería, lácteos, refrigerados y congelados, y cinco de alimentación y no alimentación. Transportando más de 585.000 palets al año -150 camiones diarios-, y consiguiendo una participación superior al 63% del total de las compras de productos frescos, refrigerados y congelados, el doble que en 2014, y del 6% en alimentación y no alimentación. Para 2016, se prevé conseguir el 80% y el 16% de las compras, respectivamente.
Origen nacional
Priorizamos las campañas de origen nacional siempre que podemos, con las garantías de calidad y frescura que tenemos establecidas. Incluso realizamos también diferentes campañas con distintos productos regionales o locales que son muy bien valorados por nuestros clientes. En la sección de frutas y verduras ofrecemos productos de temporada, de distintas producciones españolas, para cubrir la demanda de todo el año, atendiendo a los diferentes calendarios productivos, como, por ejemplo, fresas y frutos rojos de Huelva y de Salamanca en verano; cítricos de la Comunidad Valenciana, Murcia y Huelva; frutas de hueso, como melocotones y ciruelas, entre otros, de Murcia, Aragón o Badajoz, etcétera.
La variedad de proveedores favorece uno de los ejes principales de Consum: dar a los clientes capacidad de elección en su compra, ofreciéndoles un surtido amplio y variado de productos. Además, en esa variedad de elección entra la apuesta por los productos locales y regionales de cada una de las comunidades autónomas donde estamos implantados. Los criterios medioambientales y de sostenibilidad son fundamentales para nuestra elección de productos y proveedores locales.
En definitiva, buscamos crear riqueza regional a través de proveedores locales como forma de devolver a la sociedad parte de los resultados que nos otorgan a través de sus compras. Es nuestra filosofía empresarial, como cooperativa y como ejemplo de empresa de economía social. Según estimaciones de la Cooperativa, en 2015 se generaron 20.000 empleos indirectos que, sin duda, es una consecuencia muy positiva de la apuesta por el producto local.
La crisis económica ha hecho que los consumidores sean mucho más exigentes en sus compras. Además de preocuparse por el precio o la calidad, los clientes son cada vez más conscientes de su responsabilidad y exigen a las empresas una actitud más sostenible desde el punto de vista ambiental y socio-laboral. Quieren comprar productos de calidad a un precio asequible, pero también eligen productos y servicios de aquellas empresas que tienen un comportamiento ético, relacionado con la sostenibilidad y el respeto ambiental de su entorno.
Con los productos de proximidad se estimula el desarrollo económico local, se genera empleo y se respeta el medio ambiente, cualidades básicas de la responsabilidad social empresarial y nuestra.
Juan Luis Durich, director general de Consum