La organización agraria Unió de Llauradors ha solicitado al Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (Ivia) que "revise en profundidad" el proceso de regulación de la variedad de mandarina Orri ante la "incertidumbre originada" por la sospecha de posibles irregularidades en su tramitación.
La petición se realizó en el transcurso de una reunión mantenida entre una representación de La Unió, encabezada por su secretario general, Ramón Mampel, con el nuevo director del Ivia, Enrique Moltó. En ella, según La Unió, coincidieron "en la necesidad de dotar de mayor transparencia a la actividad del instituto investigador".
La solicitud de La Unió, hecha pública a través de un comunicado, se producte pocos días después de la polémica generada por la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) respecto a otra variedad de mandarina tardía, la Tango, al airear un informe que afectaba a los derechos de explotación en relación con la Nadorcott.
Como adelantó elEconomista, el informe que firmaba un investigador del Ivia "no está avalado oficialmente", por el instituto, según confirmó su director a La Unió. Según esta organización agraria, Moltó dijo al respecto que, dado que se encuentra en un proceso judicial, "el IVIA no va a tomar parte en este asunto mientras diriman los tribunales".
Posibles irregularidades
La Unió trasladó al director del Ivia que en el proceso de regulación de la variedad Orri, de origen israelí, se han podido producir irregularidades, al comparar esta variedad con la Mor cuando sus orígenes genéticos son totalmente diferentes, lo que lleva a pensar a La Unió que "el proceso de registro ha sido inadecuado y poco riguroso y que para solicitar el registro de una nueva variedad se deben realizar obligatoriamente los ensayos con la más similar o con la variedad de la cual procede".
Según La Unió, "en el caso de la Orri se deberían haber realizado los ensayos comparativos con la variedad Orah, variedad original a partir de la cual se obtuvo y además la más parecida a ella".
Al haberse comparadocon la variedad Mor "supuestamente pueden existir indicios de ocultación o manipulación no imputables al Ivia, es decir, se tenía que haber comprobado que la Orri era diferente a la Orah", según sospecha La Unió. La titular de los derechos de explotación de la Orri en España es el grupo murciano AMC (Antonio Muñoz y Cía).
Evitar los 'royalties'
La Unió también demanda públicamente que se realicen las gestiones y trámites necesarios para poder irradiar la variedad Orah en la Comunitat Valenciana con la finalidad de obtener y poner a disposición del sector citrícola valenciano una nueva variedad con características deseables para la citricultura valenciana, "y que no se deban satisfacer los royalties que se le exigen a la variedad Orri, favoreciendo la competitividad y rentabilidad de las explotaciones citrícolas", concluye la nota.