
El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, y el consejero de Hacienda valenciano, Juan Carlos Moragues, se enfrentaron este martes en Valencia, en un cruce de declaraciones que evidenciaron el enfrentamiento creciente entre el Gobierno y la Generalitat en el asunto de la financiación autonómica.
El motivo fue la negativa de Moragues a realizar más recortes después de anunciar que la Comunitat Valenciana no cumplirá el objetivo de déficit del 1 por ciento, a lo que Beteta respondió que la Comunitat "tiene recorrido en materia de ajuste, se lo hemos dicho y se lo vamos a exigir".
Beteta acudía como presentador de Moragues en una conferencia de Fórum Europa, Tribuna Mediterránea, y tanto en la presentación como en la conferencia todo fueron alabanzas mutuas a la "seriedad" y el "rigor" de la Generalitat y a la ayuda en forma de préstamos del Estado.
No obstante, el conseller hizo un discurso muy reivindicativo en el que recordó a Beteta, con abundancia de datos, que la Comunitat Valenciana ha realizado "el mayor esfuerzo" en la reducción del déficit -algo que también dijo Beteta en su presentación- pero que su problema "no es de gasto, sino de ingresos", ya que es la peor financiada.
"Nosotros ya hemos hecho los deberes, ahora los deberes les toca hacerlos a otros. Hace falta voluntad política para cambiar el modelo de financiación", afirmó Moragues.
La respuesta de Beteta al finalizar la conferencia fue contundente, a preguntas de los periodistas: "Valencia todavía tiene recorrido" en materia de ajuste, "y el conseller lo sabe y sabe dónde", afirmó. "Tiene recorrido, se lo hemos dicho y se lo vamos a exigir", insistió, sin querer revelar dónde.
Moragues había revelado durante su intervención que envió al Ministerio un "informe de contabilidad analítica" de los gastos que tiene cada una de las comunidades autónomas, donde, según dijo, en la mayoría de ratios la Comunidad Valenciana es la más eficiente en el gasto.
Beteta se había leído el informe pero, al respecto, señaló que "en su propio documento pone de manifiesto dónde se puede recortar" porque "no en todos los servicios públicos es el más eficiente, y él lo sabe". Por ello, fue tajante al afirmar que la Generalitat "debe llevar a cabo los esfuerzos adecuados para acercarse" al límite del 1 por ciento de déficit fijado como objetivo para 2014. "Veremos si los hace", añadió.
El número dos del Ministerio de Hacienda también descartó la pretensión de Valencia de que el nuevo sistema de financiación autonómica entre en vigor el 1 de enero de 2014, al sostener que "mientras no haya más recaudación" cualquier cambio en el sistema sería "un reparto de una tarta pequeña".
"Tenemos autogobierno"
Preguntado por las declaraciones del secretario de Estado, Moragues afirmó que "donde se puede incidir es en temas sensibles" de sanidad, educación y bienestar social. "No lo vamos a hacer porque otras comunidades no lo han hecho", manifestó.
Ante la insistencia de los periodistas respecto a la dependencia que tiene el actual Gobierno valenciano del dinero del Estado -acaba de aprobar un préstamo del Fondo de Liquidez Autonómica de 936 millones-, Moragues remarcó que esos capítulos "son intocables" y que hay "líneas rojas" que no se van a traspasar. "Tenemos autogobierno y nuestra posición es clara".
El conseller argumentó que los servicios básicos "se tienen que prestar con unos estándares de calidad iguales a las otras comunidades autónomas" y que, tras haber hecho recortes en otros ámbitos, en ese no se va reducir la calidad del servicio "en ningún caso".
Llamamiento a la sociedad civil
Entre los asistentes a la conferencia estuvieron los consejeros de Hacienda de Aragón y Baleares, que viajaron expresamente para el acto.
En ella, Moragues recibió un fuerte aplauso al llamar a la sociedad civil a apoyar a la Generalitat en esta reivindicación ante el Gobierno. "Nosotros, con lealtad institucional, con estilo y con elegancia, ponemos el grito en el cielo" para pedir el cambio del modelo, dijo Moragues.
No obstante, el consejero incidió en que dicha petición "no es una cosa del consejero de Hacienda, del Gobierno autonómico, de las siglas, del Partido Popular" sino de "la sociedad valenciana", ya que, según dijo, de esta transformación "depende el desarrollo económico de la región". Tras esa encendida proclama, hasta Beteta aplaudió, lo que le agradeció expresamente el conseller.