
La empresa de cigarrillos electrónicos Essenz ha decidido celebrar la apertura de su tienda número 100 regalando el montaje a la fraquiciada que la ha puesto en marcha, María Ángeles Umbert.
La afortunada abrirá la tienda en Vinaròs (Castellón) y se ahorra así los 5.000 euros que iba a invertir en el pedido mínimo de producto, el equipo informático, el mobiliario y la cartelería, según ha explicado la empresa de Ernesto Llosá en un comunicado.
Essenz ha esperimentado un crecimiento vertiginoso, ya que abrió su primera tienda en mayo de 2013 y en apenas ocho meses ha alcanzado el centenar, la mayoría en la zona mediterréna. La compañía tiene sucursales en Italia y Portugal.
Según ha relatado la empresa, María Ángeles Umbert se vio afectada hace dos años por el ERE que llevó a cabo la fábrica en la que trabajaba y en noviembre de 2012, con 52 años, le confirmaron en su oficina del Inem que a partir del mes siguiente dejaba de cobrar la prestación por desempleo.
Con una hija en Finlandia "buscando un futuro mejor" y pocas esperanzas de encontrar un empleo por cuenta ajena, su exmarido la animó a hacerse emprendedora. Buscó un modelo de franquicia asequible y se decantó por el sector del cigarrillo electrónico, que está de moda en el mundo de la franquicia por su baja inversión y sus expectativas de crecimiento.