
El grupo de porcelanas Lladró ha propuesto a los trabajadores una rebaja de la jornada laboral y del sueldo del 27 por ciento a partir de enero de 2014, como solución para sustituir el régimen de fijos discontinuos que la compañía venía aplicando desde 2009 y que la Inspección de Trabajo ha ordenado suprimir a partir del próximo 31 de diciembre, un año antes de lo previsto, como adelantó elEconomista el pasado 4 de septiembre.
El régimen aún en vigor supone que cada trabajador tiene un tiempo de inactividad de 100 días al año, un 27 por ciento. La intención de la compañía es, por un lado, mantener esa reducción de jornada y costes laborales para adecuar la producción a las ventas, y por otro, hacerlo sin recurrir a los despidos.
La medida que se tome afectará a casi 500 trabajadores de los centros de producción de Tavernes Blanques (Valencia), que integran las plantillas de las sociedades Lladró y Arte y Porcelana.
La propuesta no ha caído bien entre los trabajadores, según fuentes sindicales. El pasado jueves se abrió el período de consultas con una reunión en la que los sindicatos propusieron que se vuelva a un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), como se hizo antes del inicio del plan de fijos discontinuos en 2009.
El inconveniente de esta solución para Lladró es que con los fijos discontinuos o la rebaja salarial reduce el importe de sus cotizaciones, mientras que con el ERTEtiene que seguir cotizando por los trabajadores afectados.