
El Gobierno valenciano aprobó este viernes la rebaja de sueldo de todos los altos cargos y personal directivo del sector público empresarial en un 2,02%, en cumplimiento de la promesa que hizo Alberto Fabra de reducir los salarios en la misma medida en que la Generalitat superase el objetivo de déficit marcado para 2012.
El límite era del 1,5% del PIB autonómico y el déficit fue del 3,52%, por lo que los sueldos bajarán un 2,02%, lo que supondrá un ahorro de 155.000 euros para la Generalitat.
El recorte salarial afectará a todo el Gobierno autonómico hasta el nivel de directores generales y, aunque no estaban incluidos en la promesa inicial, a los directivos del sector público empresarial.
En el caso de Alberto Fabra, que cobra 67.615,92 euros brutos al año, pasará a percibir 66.250,08 euros, es decir, 1.365,84 euros menos al año. Alberto Fabra es uno de los presidentes autonómicos que menos cobra y su retribución es menos de la mitad que la de su homólogo catalán, Artur Mas.
El recorte anual se hará efectivo a partir de la nómina de julio, es decir, que se acumulará en solo seis meses, según explicó el vicepresidente y portavoz del Ejecutivo, José Císcar, al anunciar la medida.
Tres consejeros se libran
Además, se hará de forma proporcional al tiempo que cada dirigente haya desempeñado el cargo durante 2012, de manera que apenas afectará a los consejeros nombrados el 10 de diciembre, que son el de Hacienda, Juan Carlos Moragues; el de Sanidad, Manuel Llombart, y la de Bienestar Social, Asunción Sánchez Zaplana. Y mucho menos a los secretarios autonómicos y directores generales nombrados las semanas siguientes a esta crisis de Gobierno.
El Ejecutivo valenciano, que atribuye el fracaso en la contención del déficit al desplome de los ingresos y al sistema de financiación autonómica, ya ha dicho que tampoco podrá cumplir el objetivo fijado para 2013, que es el 1,3%, si no se eleva mediante lo que se ha denominado el "déficit asimétrico". Si lo incumple, tendrá que volver a bajarse el sueldo en 2014.