El grupo Mediamed, principal adjudicatario de canales comarcales de TDT en la Comunidad Valenciana en 2005, con 13 de los 42 otorgados, no estará en la fase final de la repetición de aquel concurso, ya que el juez de lo Mercantil número 2 de Valencia ha aprobado el plan de liquidación de la empresa promovida por el constructor leonés José Luis Ulibarri, que después fue imputado en el caso Gürtel.
Aquella adjudicación fue anulada por el Tribunal Supremo en octubre de 2012, pero el Gobierno valenciano, en lugar de convocar un nuevo concurso, decidió validar todo el proceso de hace siete años excepto la parte final, por lo que volverá a adjudicar las TDT después de que la mesa de contratación haga las valoraciones conforme a la ley, que era el defecto de forma que motivó la anulación.
El problema es que han pasado más de siete años y, como ocurre con Mediamed, algunas de las adjudicatarias han desaparecido, mientras otras se fusionaron o se vendieron a terceros.
Ulibarri se hizo con las 13 licencias a través de un conglomerado de empresas locales que rápidamente se unieron para formar Mediamed. El grupo entró en crisis y se declaró en concurso de acreedores tras estallar el caso Gürtel en 2009. Ulibarri vendió el grupo a empresarios locales y actualmente la mayoría de sus televisiones no emiten.
Para optar al concurso, el constructor fue asesorado por el despacho Eius Abogados, del que era socio el entonces diputado popular por Valencia José María Michavila.
La Generalitat volverá a adjudicar las TDT
