La Conselleria de Hacienda de la Generalitat valenciana ha reducido un 24 por ciento durante los próximos 24 meses y un 22 y un 20 por ciento los dos años siguientes, la retribución de las oficinas liquidadoras en las que los registradores de la propiedad recaudan y gestionan varios impuestos autonómicos.
Los registradores gestionan las denominadas oficinas liquidadoras de distrito hipotecario en las que los ciudadanos pueden abonar los impuestos sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados y sobre Sucesiones y Donaciones.
La rebaja, pactada con la Junta Territorial de la Comunitat Valenciana del Colegio de Registradores de la Propiedad y Mercantiles de la Comunidad Valenciana, será del 24 por ciento los primeros 24 meses, a partir del 1 de mayo de 2013; del 22 por ciento entre mayo de 2015 y abril de 2016, y del 20 por ciento en los 12 meses siguientes, hasta abril de 2017.
Con ello, la Conselleria que dirige Juan Carlos Moragues prevé ahorrar 17,2 millones de euros, repartidos en 4,62 millones los dos primeros años, 4,24 millones el siguiente y 3,85 el último. Se trata de cifras estimadas, ya que la recaudación depende de la actividad económica.
La disposición establece también que la retribución de cada oficina no podrá ser inferior a 30.000 euros anuales.
Hacienda justifica la medida en la orden que este lunes publica el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana, en la que afirma que "la actual situación financiera de la Comunitat Valenciana obliga a la Generalitat a adoptar determinadas medidas provisionales de reducción de las retribuciones por las actuaciones de gestión de las oficinas liquidadoras".
Las retribuciones de estas oficinas vienen fijadas por una orden de 1993 en la se establece un porcentaje del 4 por ciento en los impuestos de Transmisiones Patrimoniales y AJD y en los de Sucesiones y Donaciones.
