La patronal azulejera Ascer se ha dirigido a los partidos políticos, al Gobierno central y al de la Comunidad Valenciana, que concentra casi todas las industrias del sector, para pedirles que "no llegue a materializarse" la posible creación de un impuesto que gravaría el consumo de gas natural en España.
Ascer hizo público un comunicado para expresar "su gran inquietud" ante esta posibilidad, que supondría, según afirma, "un duro golpe para la actividad industrial azulejera", que es la que más gas consume en España.
En concreto, según estimaciones realizadas por la patronal que preside Joaquín Piñón, las azulejeras tendrían que hacer frente a un coste adicional que alcanzaría los 43 millones de euros, cantidad que "supera con creces la previsión de beneficios para 2012", llevando al sector a pérdidas y, consecuentemente, al cierre de empresas y pérdida de empleo.
Añade que esta medida "vendría a complicar aún más el delicado momento que atraviesa el sector y comportaría una enorme pérdida de competitividad frente a los otros países productores".