
La marca españa, que desde 2006 utilizan las empresa de moda infantil y puericultura para ganar peso en los mercados de todo el mundo, está dando sus frutos, a tenor de los resultados de los últimos dos años, en los que las exportaciones han crecido un 50 por ciento.
El año pasado, el aumento de las ventas exteriores fue del 21 por ciento, y "hay recorrido", ya que la exportación supone solo el 38 por ciento de las ventas totales del sector, según el presidente de la Asociación Española de Productos para la Infancia (Asepri), Vicente Mompó.
La marca españa supone, según Mompó, "unirnos todos bajo una misma bandera". "Nos alegramos de que coincida con la idea del Gobierno español, pero nosotros llevamos seis años trabajando con ella", añade.
El presidente de Asepri ha hecho balance de la evolución del sector en 2011 durante la celebración de la 75 edición de la Feria Internacional de la Moda Infantil y Juvenil (FIMI), que se celebra hasta el domingo en Valencia.
La facturación fue de 1.083 millones de euros, solo un 1 por ciento superior a la de 2010, debido al mal comportamiento del mercado nacional, que cayó un 8 por ciento. La buena noticia fue el aumento no solo de la exportación, sino también del número de empresas exportadoras, que ya son el 77 por ciento del total, cinco puntos más que en 2010.
Uno de los retos que Asepri se ha marcado para 2011 es reforzar la marca españa en los mercados latinoamericanos -empezando por Colombia, Perú y Panamá-, Europa del Este, Oriente Próximo y Asia.
Según Mompó, países como Colombia y Perú han alcanzado un nivel de desarrollo, cubiertas la primeras necesidades, en el que ?están cuidando a la infancia?, por lo que es un mercado con alto potencial de crecimiento.
Volver a fabricar en España
Otro de los retos de la patronal de la moda infantil es volver a fabricar en España para "crear tejido industrial y no perder el know how acumulado en los últimos años", según Mompó.
Para lograrlo, Asepri abrirá en 2013 un "vivero productivo" en la provincia de Valencia -el 30 por ciento de los fabricantes están allí-, en el que invertirá 350.000 euros. Será una planta de producción al servicio de las empresas, en el que recuperarán "a gente que sabe y está a punto de jubilarse para que transmitan ese conocimiento de confección, diseño, patronaje y modelismo a las nuevas generaciones".
El 75 por ciento de la moda infantil española se fabrica en Asia, pero los costes ya no son tan diferentes como hace 10 años y no siempre compensan los plazos de entrega del producto. Según Mompó, en Italia iniciaron un proceso similar y el 30 por ciento de la producción que se sacó ha vuelto, solo que al sur del país en lugar de al norte.
Falta de financiación a los comercios
Mompó se queja de lo mismo que todos los sectores económicos, de la falta de financiación de los bancos, aunque en el caso de la moda infantil tiene una particularidad, y es que para cartas de crédito a la exportación sí hay financiación.
El "gran problema", según el presidente de Asepri, es que los bancos han cerrado el grifo "a las pequeñas tiendas y boutiques que necesitan líneas de crédito para comprarnos a nosotros", con lo que frenan cualquier atisbo de recuperación en el mercado nacional.