
El Gobierno valenciano ha aprobado este viernes nuevas tasas e impuestos que se aplicarán de inmediato y que afectarán a las empresas energéticas, a las que generen emisiones y a las que utilicen vertederos para sus residuos, además de a todos los ciudadanos usuarios de la justicia, para la que se implantan nuevas tasas.
Además, el Ejecutivo de Alberto Fabra vuelve a rectificar su propósito de no cobrar el Impuesto sobre el Patrimonio, y si el pasado 27 de abril anunciaba que lo repondría a partir de 2013, ahora ha dicho que lo reimplantará este mismo año, con una recaudación prevista de 60,66 millones.
El Ejecutivo valenciano ha aprobado el anteproyecto de Ley de Impuestos Medioambientales de la Comunitat, que incluye la creación de dos nuevos impuestos de carácter medioambiental, la introducción de tasas judiciales, además de una serie de medidas en materia de ingresos, en el marco del Plan Económico Financiero de Reequilibrio de la Comunitat Valenciana 2012-2014 (PEF).
Según ha anunciado el consejero de Hacienda, José Manuel Vela, el impuesto sobre actividades que repercuten en el medio ambiente gravará la incidencia, alteración o riesgo de deterioro sobre el medio ambiente derivado de la realización de determinadas actividades económicas en el territorio de la Comunitat. "No se gravan los inmuebles en los que realizan las actividades o los ingresos que se obtienen por las mismas, sino los distintos elementos que inciden en el daño o riesgo medioambiental, gravándose más cuanto mayor es el daño o riesgo considerado", explicó Vela.
Por ello, el impuesto grava de forma progresiva la emisión de determinados gases cuanto mayor es el volumen emitido; o se aplica un tipo diferente, si se trata de residuos radioactivos, de baja, media o alta intensidad; o se grava más a las nucleares que a las centrales eléctricas de ciclo combinado de gas o a las centrales hidroeléctricas.
Los ingresos por el citado gravamen -29,37 millones de euros al año- se destinarán a los gastos de la Generalitat en programas de conservación y mejora del medio ambiente.
Según Vela, se trata de un Impuesto que ya existe en algunas Comunidades Autónomas, como Castilla La Mancha, Extremadura, Castilla y León, y Murcia.
Actividades gravadas
La Generalitat ha explicado que las actividades gravadas por el nuevo impuesto son la producción de energía eléctrica (excepto la eólica, solar u otras energías renovables y la de autoconsumo); la producción, tenencia, depósito, almacenamiento y transporte de determinadas sustancias consideradas peligrosas en función de los riesgos por accidentes graves; el almacenamiento de residuos radioactivos (excepto para actividades médicas o científicas), y la emisión de determinados gases contaminantes a la atmósfera.
Las tarifas a la producción de energía eléctrica serán de 0,0018 euros por kilovatio hora en las centrales nucleares; 0,0008 en las térmicas, y 0,0004 en las hidroeléctricas.
En el almacenamiento de sustancias peligrosas, los de residuos radiactivos pagarán 5 euros por kilogramo si son de alta actividad, y 1.000 euros por metro cúbico si son de media o baja actividad. Para las emisiones de gases contaminantes a la atmósfera se establece una escala progresiva, con tipos de entre 36 y 200 euros por tonelada.
Impuesto sobre vertederos
El nuevo impuesto sobre la eliminación de residuos en vertederos afecta a las empresas que depositen residuos en ellos. Los residuos no peligrosos pagaran entre 3 y 5 euros por tonelada; los residuos de la construcción pagaran 0,5 euros por metro cúbico, y, finalmente, los residuos peligrosos pagaran entre 7 y 10 euros por tonelada.
En cuanto a las nuevas tasas judiciales, se establece el pago de entre 50 y 95 euros por distintos trámites en los órdenes civil y contencioso-administrativo. La mayoría de los actos gravados alcanzan una cuantía de 95 euros.