
Los accionistas del Banco de Valencia podrán mantener su actual porcentaje del capital si acuden a la ampliación de 1.000 millones planteada por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob), en la que tienen derecho de suscripción preferente.
Los 1.000 millones supondrán el 91 por ciento del nuevo capital del banco, tras la operación acordeón que se votará en la junta de accionistas convocada para el 14 de mayo.
Según el informe de los administradores del Frob relativo a la ampliación, los accionistas tendrán derecho a suscribir su actual porcentaje y a solicitar las acciones sobrantes en una segunda y tercera vuelta. En todo caso, si ninguno acudiese no lo perderían todo, ya que matendrían el 9 por ciento el capital.
Si no se completa la ampliación, como es probable que ocurra, el Frob ofrecerá las acciones sobrantes al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que es el vehículo a través del cual se quiere subastar el banco.
El mayor de los actuales accionistas de la entidad es Banco Financiero y de Ahorros (BFA), que tiene derechos de voto sobre el 39 por ciento a través de una filial, aunque realmente posee el 27 por ciento. La matriz de Bankia no acudirá a la ampliación.
Del resto de los accionistas medianos, el mayor es Libertas 7, controlado por la familia Noguera, con el 5,17 por ciento, seguido por Sorman (familia Soriano), con el 3,37. Para mantener sus porcentajes deberían desembolsar 51,7 y 33,7 millones, respectivamente, por lo que también es difícil que acudan a la ampliación.
Como refencia para los actuales accionistas, tendrán derecho a suscribir 10,15 acciones de 0,20 euros por cada título que posean, es decir, 2,03 euros.
El valor bursátil fue la referencia
Según desvelan los administradores del Frob, la referencia para fijar el precio de las nuevas acciones en 0,20 euros fue el valor bursátil del Banco de Valencia en el mes anterior al pasado 12 de abril.
Al ser el nominal mayor de esta cantidad, en concreto, 0,25 euros, la ley obliga a hacer la reducción de capital para ajustar el valor nominal de las antiguas acciones al de las nuevas, y los 24,6 millones de reducción se apunta a reservas, por lo que el patrimonio neto del banco se mantiene en 353,4 millones.