
Valencia inagurará este año y sobre todo en 2012 unos 140.000 metros cuadrados de oficinas, lo que tendrá un impacto importante en un mercado de menos de 700.000 metros cuadrados donde el 22 por ciento está desocupado.
La ciudad de Valencia acabó 2010 con el 22 por ciento de su parque de oficinas sin alquilar, una tasa que más que duplica la de 2007, como consecuencia de la crisis económica y del aumento de los metros cuadrados construidos, que se ha frenado.
Así lo constata un informe de la inmobiliaria BNP Paribas Real Estate presentado este jueves. En Madrid y Barcelona, la "tasa de disponibilidad", como se denomina al porcentaje de oficinas por alquilar, está en torno al 13 por ciento, según explicó el director territorial de la inmobiliaria, Joaquín Ivars.
La tasa en Valencia se mantendrá más o menos estable este año, en el que saldrán unos 20.000 metros cuadrados nuevos que serán absorbidos por el mercado. Sin embargo, a principios de 2012 está prevista la inauguración de los edificios administrativos de la Generalitat en la antigua cárcel Modelo, con cerca de 100.000 metros cuadrados que se vaciarán en los edificios que ahora ocupa la administración autonómica por toda la ciudad. "Va a haber una consecuencia directa sobre el mercado de oficinas en Valencia", advirtió Ivars.
A esto hay que añadir otros 20.000 metros cuadrados que Ivars calcula que pueden salir en 2012, sobre todo de bancos que han retomado las obras en edificios paralizados que se han adjudicado mediante daciones en pago. En total 140.000 metros cuadrados nuevos en dos años que elevarán un 18 por ciento la oferta actual, que es de 767.000 metros cuadrados.
La caída de la demanda en 2010 supuso una pérdida de la rentabilidad para los propietarios, según Ivars, ya que muchos inquilinos "se han trasladado a oficinas más pequeñas, baratas y de menor calidad" o han pedido renegociar las rentas. Algunos edificios se han puesto en venta e "inversores nacionales están estudiando el mercado de Valencia como una opción", aseguró.