
La actividad turística emplea en Castilla y León a 72.287 trabajadores. Este registro histórico en la afiliación del sector se alcanzó el pasado verano, en concreto al cierre del mes de julio. La cifra la ha destacado este miércoles la consejera de Cultura y Turismo de Castilla y León, Mª Josefa García Cirac, en la Feria Internacional del Turismo de Interior (INTUR), que se está celebrando en Valladolid.
INTUR ha conquistado tras 19 ediciones la consideración de principal certamen especializado en la oferta turística de interior. A nivel nacional, este año participan 12 Comunidades Autónomas con presencia institucional. Castilla y León como Comunidad anfitriona -y promotora de la feria- hace un gran despliegue de su oferta turística. Los nueve Patronatos Provinciales que la integran muestran en INTUR sus propuestas de turismo cultural, de naturaleza, gastronómico, enológico, deportivo...
Como destino turístico, Castilla y León está atravesando una grata coyuntura, de auge. La internacionalización de la oferta turística, fuertemente promovida por la política turística de los últimos años, ha dado sus frutos. En 2014 se alcanzó un récord absoluto de 1.328.206 viajeros internacionales en los alojamientos turísticos de Castilla y León. Esto se tradujo en un crecimiento del 8,18% respecto al año anterior.
La buena marcha del turismo también ha beneficiado al turismo rural. Los turistas extranjeros, que tradicionalmente viajaban a España atraídos por su oferta de sol y playa, están comenzando a descubrir el atractivo de los destinos de interior. Los alojamientos rurales de Castilla y León recibieron el año pasado más de 55.000 viajeros internacionales, con una mejora del 10,76% respecto a 2013. El volumen de pernoctaciones generadas por estos visitantes superó las 100.000 pernoctaciones, con un incremento del 8,85%.
El crecimiento del empleo en el turismo se vincula con la mayor afluencia de visitantes a la Comunidad. El último verano fue extraordinariamente bueno para Castilla y León, igual que también lo fue para el conjunto de los destinos turísticos de interior españoles; los meses de julio y agosto se saldaron con 1.650.783 viajeros, un 5,26% más que el verano anterior, y 2.970.668 pernoctaciones, un 5,21% más. La Semana Santa -uno de los 'picos' de afluencia turística- había registrado previamente el mejor resultado de los últimos 15 años, cerca de 150.000 viajeros y más de 250.000 pernoctaciones.