
Vuelos ilimitados por el pago de una cuota mensual. All you can fly. Estos son el modelo de negocio y la filosofía de Take Air, la primera línea aérea creada en Bélgica desde el año 2003. Su concepto innovador, importado de EE.UU., se apoya en la idea de introducir la "tarifa plana" en la aviación comercial. Su producto se dirige fundamentalmente a los viajeros frecuentes, los frequent flyers, perfil que suele coincidir con el de los viajeros de negocios.
En este sentido, Matthieu Dardenne, fundador y director general de Take Air, afirma que ésta "no es una aerolínea más" y enumera las ventajas para sus clientes: flexibilidad, comodidad, ahorro de tiempo. En sus propias palabras, "lo mejor que la aviación actualmente tiene que ofrecer", y además evitando sorpresas desagradables.
La aerolínea despega con dos rutas regulares que lanzará en marzo de 2015: Amberes-Zurich y París-Londres. "Es la solución ideal para cualquier persona que vuele mucho por negocios o razones personales", asegura Dardenne. La cuota de miembro parte de los 1.650 euros mensuales.
Una solución para los business flyers
Take Air opera sólo con aviones ejecutivos -como el Beechcraft King Air 200 y 350-, siempre desde y hacia las terminales convenientes para los viajeros de negocios. La compañía asegura que esto proporciona a sus miembros asociados un alto nivel de confort, con un salón, meeting rooms, espacio suficiente para las piernas durante el vuelo y sin colas de seguridad. El director general de la aerolínea afirma que para alguien que deba volar más de dos veces al mes, hacerlo con Take Air le permitirá ahorrar fácilmente 90 minutos en cada etapa de su viaje, puesto que es factible realizar el check-in hasta 15 minutos antes de la salida. Cada socio de Take Air recibe asistencia personal de un "airport angel", que estará en situ para ayudarle en los detalles de su viaje. Otra ventaja es la rapidez en la reserva o cancelación de los vuelos: menos de 30 segundos.
Aunque Take Air comenzará a operar con sólo dos rutas, los dos trayectos elegidos dan una idea clara del enfoque que se seguirá: rutas de menos de 90 minutos de vuelo de carácter estratégico o económico. Según un estudio encargado por la aerolínea a Vlerick Business School, hay al menos 150 destinos en Europa que se adaptarían al concepto de negocio de Take Air. Por esta razón, la compañía belga espera ir incrementando su red de conexiones cada seis meses.