
Los viajeros que utilicen el móvil en otro Estado miembro de la Unión Europea para llamar, enviar mensajes o descargar datos podrían pagar lo mismo que en su país de origen a partir del 15 de diciembre de 2015 en caso de que salga adelante el Proyecto de Ley respaldado ayer martes por la Comisión de Industria del Parlamento Europeo.
Los eurodiputados también abogan por impedir a los proveedores de Internet que bloqueen o ralenticen el acceso a servicios ofrecidos por la competencia (por ejemplo, las aplicaciones de llamadas por Internet, como Skype). El pleno de la Eurocámara debatirá y votará este asunto los días 2 y 3 de abril en Bruselas y la ponente será una eurodiputada, española del Partido Popular, Pilar del Castillo.
"El Parlamento Europeo ha dado un gran paso hacia la consolidación del mercado único de las telecomunicaciones", ha asegurado del Castillo en relación a la votación de ayer que se saldó con 30 votos a favor, 12 en contra y 14 abstenciones. "La Comisión parlamentaria no sólo ha propuesto eliminar el 'roaming' de las llamadas, los mensajes de texto y los datos a partir del 15 de diciembre de 2015, sino que también ha presentado propuestas sustanciales para lograr una gestión eficaz del espectro, lo cual permitirá el despliegue del 4G y el 5G en toda Europa", subraya.
Del Castillo añade que se han logrado, además, otras salvaguardias para la neutralidad de la red, de modo que los usuarios puedan utilizar aplicaciones y servicios de su elección.
Fin del 'roaming' en 2015
Los eurodiputados han respaldado eliminar las tarifas para el uso de los teléfonos móviles en el extranjero (el llamado 'roaming') a partir de finales de 2015. No obstante, han pedido a la Comisión Europea que elabore directrices para casos excepcionales en los que se permitiría a las empresas aplicar tarifas de itinerancia. El objetivo de esta medida es proteger a las empresas de telecomunicaciones frente al "uso anómalo o abusivo del mercado los servicios de itinerancia". En cualquier caso, las tarifas aplicadas tendrían que estar por debajo de los límites marcados por la legislación europea vigente.
A diferencia de la Comisión, los eurodiputados no consideran necesario regular los precios de las llamadas internacionales efectuadas desde el país de origen.