El pasado viernes se clausuró en el recinto de Expomeloneras, en Gran Canaria, el I Foro Internacional de Turismo Maspalomas Costa Canaria. En su segunda y última jornada acogió una mesa redonda dedicada a la intermediación turística y el turismo procedente de los mercados nórdicos.
La isla está especialmente interesada en los turistas nórdicos, que suponen ya cerca del 27% del total de extranjeros que recibe, por delante de alemanes y británicos, según expuso el director gerente del Patronato de Turismo de Gran Canaria, Pablo Llinares. Alrededor de 800.000 nórdicos eligieron en 2012 Gran Canaria como destino vacacional, un 16% más que el año anterior. Su estancia es de 9 días y su gasto medio por día asciende a 135 euros. En un porcentaje del 80% son turistas fieles, que repiten el destino. Las previsiones para 2013 apuntan que se superará esta cifra, dado a la altura de octubre ya se rondaban los 700.000 turistas nórdicos.
Al auge de este mercado ha contribuido, como destacó Santiago de Armas, presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara de Comercio de Gran Canaria, que la compañía aérea Norwegian haya abierto una base en el aeropuerto isleño. Asimismo, cada año se incrementa la cifra de turistas nórdicos que viajan a Gran Canaria con la intención de pasar una temporada larga en la isla. Su deseo es escapar a la dureza del invierno de sus países de origen y en el archipiélago canario encuentran un destino idóneo.
La Cámara de Comercio aprovechó el marco que el Foro le brindaba para anunciar el lanzamiento en Suecia y Noruega de un programa de venta de viviendas costeras, como segundas residencias, en Gran Canaria. Dicho programa se pondrá en marcha en enero de 2014.
La perspectiva de los turoperadores
La mesa redonda contó también con la participación de mira Savolainen, gerente de la oficina de Thomas Cook. Esta compañía, que ofrece 65 vuelos semanales en invierno desde los países nórdicos, transportó 285.000 turistas del norte de Europa el pasado año. Savolainen destacó, entre los motivos que llevan a los nórdicos a elegir Gran Canaria la seguridad, la calidad de los hoteles y los servicios que se les ofrecen. Thomas Cook dispone de una plantilla de casi 100 trabajadores en la isla para atender en invierno a sus clientes nórdicos.
Los participantes en la mesa redonda.
Por su parte, Christian W.A. Fransson, representante de TUI y también presente en la mesa redonda, indicó que su empresa ha incrementado en más de 600.000 plazas su oferta en Gran Canaria. En su opinión, es importante atraer a los turistas jóvenes -de entre 25 y 35 años- para los que no existe todavía una buena oferta. En este sentido, reivindicó la necesidad de crear más zonas wifi públicas y gratuitas, explicando que "los noruegos están acostumbrados a estar todo el día conectados". TUI trasladará 55.000 viajeros nórdicos este invierno a Gran Canaria y durante el verano elevará en 10.000 las plazas ofertadas.
En relación a productos turísticos de interés para este mercado -más allá del turismo de sol y playa-, Björn Westin, director de la empresa de turismo activo Rocky Adventure señaló las posibilidades de la naturaleza, el senderismo y los deportes acuáticos. "Tenemos 800 kilómetros de senderos para recorrer, pero casi nadie los conoce", dijo.
Turista de salud
El turismo de salud fue también objeto de análisis. Sebastián Sansó, director-gerente de Hospitales San Roque, una empresa con experiencia en la creación de paquetes de salud para turistas nórdicos, destacó el auge de esta modalidad de turismo. En toda España mueve unos 21.000 turistas y genera un negocio de 12,1 millones de euros. Sansó explicó que los visitantes nórdicos eligen Gran Canaria no sólo por el clima, sino también por el nivel sanitario y su competitivo coste -un 30% por debajo de otros países comunitarios-. Sólo en 2012, el Hospital San Roque de Maspalomas atendió a más de 10.000 pacientes extranjeros. "Los nórdicos eligen nuestra isla para atender sus problemas de salud y para ello contratan un paquete de salud y un paquete de vacaciones".
La actual normativa permite a los ciudadanos europeos recibir tratamiento en otro país de su elección, previa autorización y gracias al sistema de financiación concertada que paga el país de origen. El importe del tratamiento se abona de forma anticipada. "Podemos llegar a ser un destino preferente para este turismo de salud", afirmó.