La agrupación empresarial Exceltur ha revisado al alza su estimación del PIB turístico para el conjunto 2013 y, en lugar de la caída del 0,4% que preveía a la altura del mes de julio, ahora calcula un crecimiento del 0,2%. "En términos técnicos esto supone la salida de la recesión del sector turístico", ha afirmado en rueda de prensa esta misma mañana José Luis Zoreda, vicepresidente ejecutivo del lobby turístico.
El optimismo de Exceltur se apoya en el buen comportamiento del turismo durante el tercer trimestre, que se saldó con un incremento del 1,3% en la actividad turística. Zoreda admite que el impulso ha procedido de la fuerte demanda extranjera, que no es ajena a las revueltas en Egipto a comienzos del verano, pero destaca dos elementos positivos que pueden marcar el punto de inflexión en la crisis que también padece el sector, como el resto de la economía. Por una parte, que el sector turístico ha creado 11.525 empleos netos al término de septiembre. "Somos el único de los grandes sectores económicos que ha sido capaz de crear empleo", reivindica Zoreda.
Por otra parte, el balance empresarial que la agrupación empresarial ha realizado del tercer trimestre, de la temporada de verano, les ha permitido "detectar" una contención de la caída de la demanda interna. Aún a falta de constatarse en el cuarto trimestre, el dato es alentador. "La caída del mercado español podría haber tocado fondo en este tercer trimestre del año", extrae como conclusión Zoreda.
El sector "locomotora"
El representante de Exceltur proclama que "este año el turismo será más que nunca la 'locomotora' de la economía española" porque está generando empleo, porque rondará los 45.000 millones de euros en ingresos turísticos al cierre de 2013 y porque ya en julio era capaz de cubrir el 100% del déficit de la Balanza Comercial. Pero, advierte que esta recuperación todavía no es sólida, ni el crecimiento puede calificarse de sostenible.
Pese a las grandes cifras, Zoreda se muestra cauto y alerta de las "sombras" que se ciernen sobre el sector. En este sentido, puntualiza que la evolución de la rentabilidad empresarial durante el verano ha sido muy dispar entre las distintas zonas turísticas. El 60,6% de los empresarios consultados al respecto no han podido elevar sus ventas y el casi el 72% no ha incrementados sus márgenes empresariales. La demanda interna se ha "reactivado", pero sólo en los destinos donde los precios han bajado. La realidad del sector es una dificultad estructural para trasladar la llegada de más turistas extranjeros y la contención de la caída de la demanda doméstica a una mejora en la rentabilidad de las empresas turísticas.
Óscar Perelli, director de área de Estudios e Investigación de Exceltur, da un dato impactante si tenemos en cuenta que España está recibiendo más turistas que nunca: "Desde el año 2000 el ingreso promedio por turista extranjero ha caído un 25%". Incluso en este magnífico año para el turismo internacional, no se ha logrado que despegue el ingreso promedio por turista que revierte en España, el cual desciende hasta julio un 2,1% en términos reales. Este porcentaje, simple resultado de cruzar los datos de ingresos turísticos del Banco de España y los cerca de 34 millones de turistas que España recibió hasta julio, es para Exceltur el "gasto relevante" que hay que tener en cuenta para tener la dimensión correcta del rendimiento del turismo.
Un apoyo prioritario
Este panorama un tanto dual, de un sector que "en 2013 ha probado su capacidad de contribuir a la recuperación macroeconómica", pero que al mismo tiempo adolece de múltiples problemas estructurales, lleva a Exceltur a reclamar un "apoyo prioritario del Gobierno y una política de estímulos" para el turismo. Zoreda ha criticado que "paradójicamente" al papel económico que está desempeñando, al turismo se le recorten los presupuestos de manera tan severa. Recordemos que el Proyecto de Presupuestos Generales del Estado contempla 313 millones de euros para el Turismo y su promoción en 2014, frente a los 622 millones que destinaba en 2011.
En la misma línea, desde Exceltur se echa en falta una política de estímulos de la que sí disfrutan otros sectores económicos, como el automóvil, con el Plan PIVE. Aunque la reivindicación no es nueva, la agrupación empresarial insiste ahora en ella con más intensidad, solicitando incentivos fiscales, financieros, de la Seguridad Social... medidas que en definitiva ayuden a mejorar la competitividad de las empresas del sector y a cimentar la incipiente "salida técnica" de la recesión.
