España es, a nivel mundial, el tercer país en número de personas que realizan intercambios de casas para uso vacacional, tan sólo por detrás de Francia y EE.UU., según un estudio realizado por la comunidad de intercambio de casas Knok.
Por detrás de nuestro país se sitúan Reino Unido e Italia, que ocupan respectivamente la cuarta y la quinta posición en el ranking mundial. En cualquier caso, el informe pone de manifiesto que el intercambio de casas se está afianzando como una alternativa cada vez más popular entre los españoles, que están venciendo las reticencias iniciales. Hace unos días, HomeExchange.com, red a la que pertenece IntercambioCasas.com, publicó un "decálogo de ideas erróneas sobre el intercambio de casas", que ilustra bien algunos de los "miedos" que los usuarios españoles están superando.
En cuanto a las razones del auge de esta fórmula vacacional, el estudio apunta que para un 35% de quienes intercambian sus casas el aspecto más valorado es el ahorro. Para un 29% sería la comodidad de alojarse en "una casa de verdad", es decir, estar de vacaciones, pero como en su propia casa.
Asimismo, un 15% destaca como principal ventaja el poder alargar el tiempo para disfrutar de las vacaciones porque el alojamiento resulta más económico. Finalmente, otro 15% valora especialmente las posibilidades que brinda para hacer nuevas amistades.
La clientela del intercambio de casas es heterogénea, aunque lo que más abunda son las familias, que suponen el 35%. Otro 30% son parejas y la mitad, un 15%, solteros que viajan solos o viajan por trabajo. Un 12% de los clientes son grupos de amigos que viajan juntos y un 8% jubilados.
El estudio también desvela la franja de edad mayoritaria, indicando que casi seis de cada diez clientes se encuentran entre los 30 y los 50 años.