
Los parques de ocio no cejan en su empeñar de idear nuevas atracciones con las que sorprender a sus visitantes. La última novedad del conocido parque francés de Futuroscope, en Poitiers, es un Aerobar.
El Aerobar que Futuroscope ha abierto al público este mes de abril es el primero del mundo y se presenta como una nueva experiencia insólita para los visitantes de este parque que han visitado más de 40 millones de personas desde su inauguración en 1987.
La propuesta del Aerobar invita a tomar un refresco o un cóctel a 35 metros de altitud, el equivalente a un edificio de 12 pisos y con las piernas colgando en el vacío. Para disfrutar con la familia o los amigos de un aperitivo "de altura", con unas excepcionales vistas de Futuroscope, es necesario ir acompañados de un asistente de vuelo. El Aerobar asciende suavemente gracias a un pequeño globo arostático que lo mantiene a flote, creando la sensación de ingravidez y vuelos entre las nubes. La atracción dura aproximadamente 10 minutos.
La experiencia del Aerobar comienza en la misma entrada de la atracción, habilitada como si de una sala de embarque se tratase. Allí se puede reservar el vuelo y encargar el aperitivo -desde una agua mineral a una copa de champagne- que se podrá degustar en "pleno vuelo". Los precios de la atracción oscilan entre los 4,5 y los 11 euros, en función del aperitivo elegido.
El Aerobar ha sido desarrollado por la empresa Aérophile en asociación con la agencia de arquitectura DVVD, que ha diseñado la estructura metálica que lo soporta.