"No difiere para nada de lo que se está acometiendo en empresas de prácticamente todos los sectores de la economía española". Éste es el argumento que Antonio Vázquez, presidente de Iberia, ofreció el pasado viernes para defender el plan de reestructuración de la compañía española.
Vázquez, que asistía a la presentación oficial de FITUR, feria de cuyo Comité Organizador es también presidente, aseguró que el plan de reestructuración de Iberia "no está puesto al hilo de la nueva ley (laboral), buscando una sucesión automática de acontecimientos que permitan una reducción de trabajadores". El presidente de Iberia afirmó que se trata de un plan "mucho más amplio y complejo" y cuyo objetivo es lograr "una política comercial y una estructura de costes racional", que permita a la aerolínea enfrentar a sus competidores en el medio y largo radio.
Asimismo, calificó de "buena noticia" que se esté negociando en estos momentos con los trabajadores, aunque no reveló detalle alguno sobre la negociación, precisamente por estar en curso. Lo que sí hizo fue reiterar que "la compañía tiene que resolver un problema de supervivencia y competitividad en beneficio de Iberia, del turismo y de la propia economía española".
Antonio Vázquez, en primer término, conversa con Luis Eduardo Cortés, presidente del Comité Ejecutivo de Ifema, en la presentación de FITUR.
Al ser preguntado sobre la posibilidad de que Iberia vuele a Asia, el presidente de la aerolínea aseguró que "no nos lo planteamos". Aunque el continente asiático sea un mercado emergente supondría una "dependencia geográfica", sin ventaja de Iberia, no existiendo además una demanda interna suficiente. No obstante, señaló que
"volar a China es algo que se revisa sistemáticamente en el deseo absoluto de que salgan los números".