Es un atractivo destino turístico del Mediterráneo, con 7.000 años de historia a sus espaldas y un clima magnífico que atrae cada año más visitantes. Malta está decidida a continuar desarrollando su turismo y piensa hacerlo reforzando la calidad de su oferta. El camino es la certificación.
Casa Rocca Piccola, uno de los primeros establecimientos certificados.
Por este motivo, la Oficina de Turismo de Malta ha puesto en marcha hace unas semanas sus Certificados de Calidad. Estas distinciones identifican aquellas residencias, espacios, monumentos y lugares que, de manera voluntaria, han decidido ser auditadas de manera regular haciendo especial hincapié en los servicios que ofrecen para testar su calidad.
Entre los requerimientos necesarios para lograr dicho galardón se encuentran que el emplazamiento turístico esté abierto de manera regular y tenga establecidos unos horarios de apertura y cierre; que el personal esté correctamente formado y ofrezca a los turistas un servicio profesional; que se tengan en cuenta las valoraciones de los visitantes para la mejora del servicio; que dispongan de página web con información actualizada, etc.
Algunos de los establecimientos que ya han obtenido su certificación de calidad son la residencia histórica de Casa Rocca Piccola, en La Valletta, el Palazzo Falson, en la ciudad amurallada de Mdina, y los Melita Trains, que realizan el recorrido por Mdina y Rabat.
