A partir del próximo 1 de febrero, el Parque Nacional Picos de Europa será gestionado por un Consorcio integrado por las Comunidades Autónomas de Castilla y León, Asturias y Cantabria. De esta forma se da cumplimiento a la sentencia del Tribunal Constitucional que dictaminó que la gestión de estos espacios naturales protegidos corresponde a la Administración autonómica.
La transferencia, que se ha hecho efectiva tras el Real Decreto suscrito por el Ministerio de Política Territorial y Administración Pública y las tres autonomías, lleva aparejado un aporte anual del Estado de 7,9 millones de euros. Asimismo, los medios humanos y materiales asimilados a la gestión del Parque Nacional pasarán a depender del nuevo Consorcio.
No obstante, mediará un periodo transitorio. Entre febrero y septiembre de 2011 se mantendrá una gestión tutelada por la Dirección de Parques Nacionales. Después la actuación del consorcio se ajustará a los criterios comunes que se fijen para la planificación y gestión del espacio natural.
Cada Comunidad Autónoma nombrará un codirector, que tendrá la responsabilidad de administrar y ejecutar las actividades del parque en su territorio. Por periodos anuales, estos tres codirectores se rotarán en las funciones de "director-conservador", correspondiéndoles entonces las funciones de dirección del consorcio y representación de la dirección del Parque Nacional.
Se crearán también un Patronato -donde estarán representadas las Administraciones Públicas y las instituciones y demás entidades vinculadas a los Picos de Europa- y una Comisión de gestión -integrada por los titulares de las consejerías competentes en materia de espacios naturales de Castilla y León, Asturias y Cantabria-.
Estos órganos de gestión y administración se dotarán, entre otras herramientas, de un Plan de Desarrollo Sostenible, que ha de fijar las normas y criterios para cualquier actuación que se lleve a cabo en el Parque Nacional.
