
La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés) aprobaba por 3 votos a favor y 2 en contra la normativa que regulará Internet como un servicio público, es decir una utility, y que garantizará la neutralidad en la red. Los proveedores de banda ancha y operadoras de cable deberán enfrentarse ahora a unas restricciones que se asemejan a las que rigen los servicios telefónicos a este lado del Atlántico.
"Estas nuevas normas se guían por tres principios: las redes de banda ancha de Estados Unidos deben ser rápidas, justas y abiertas" aseguraba la agencia tras la votación haciendo referencia a la mayoría de recomendaciones realizadas por los casi 4 millones de comentaristas que han participado en el procedimiento para desarrollar esta normativa.
La conocida como Neutralidad de la Red, un concepto defendido a capa y espada por el presidente de EEUU, Barack Obama, ha generado un polémico debate, ya que regulará Internet como un servicio público englobado dentro de la normativa conocida como Title II, que regula a las operadoras telefónicas y que fue aprobada en 1933. Los defensores de esta regulación defienden que todo el tráfico en la red debe ser tratado por igual, mientras que los críticos argunmenta que las nuevas reglas suponen una invasión del gobierno de la empresa privada.
La medida aprobada el jueves prohibirá a los proveedores de banda ancha bloquear o ralentizar el tráfico en función de su contenido. También impide la "priorización" de la velocidad a través del pago, que favorecería sólo a aquellos que pagasen extra para acceder a las conocidas "autopistas rápidas", que algunos de los proveedores tenían previsto crear.
El presidente de la FCC, Tom Wheeler, quien ha defendido públicamente la neutralidad de la red, afirmaba en un comunicado que la agencia se enfrenta ahora a un importante desafío, ya que la nueva normativa ahoga el fomento de la inversión en banda ancha por parte del sector privado. Sin una fuerte inversión en redes, el acceso libre y rápido a Internet podría plantear problemas en el futuro. Al mismo tiempo, prohibirá prácticas nocivas dirigidas a aplicaciones específicas mientras fulmina la posibilidad de que aquellos que paguen más contarán con un acceso más rápido al contenido. Las acciones de compañías telefónicas y wireless como AT&T o Verizon no se inmutaron ante el paso de la nueva regulación. Aún así, proveedores de cable e Internet como Comcast y Time Warner Cable operaban con caídas tras conocerse el resultado de la votación.