Por Madeline Kennedy
(Reuters Health) - Un estudio de Reino Unido revela que unode cada cuatro menores de cinco años infectados por Salmonellaadquirió la enfermedad de un reptil como mascota.
Esos niños eran significativamente más pequeños que el restode los niños infectados, eran más propensos a quedar internadosy a desarrollar infecciones invasivas en la sangre o el cerebro.
"En un hogar con dos niños muy pequeños y reptiles comomascotas, hay un buen motivo para tomar precauciones", dijo pore-mail el doctor Daniel Murphy, del Hospital Real Cornwall,Inglaterra.
La Salmonella es un tipo de bacteria que suele estarasociada con las enfermedades de origen alimentario. En general,provoca síntomas como náuseas y vómitos. Murphy, que dirigió elnuevo estudio, agregó que en los casos más graves, provocainfecciones sanguíneas, meningitis e infecciones óseas. Los CDCestiman que 1,2 millones de estadounidenses se enferman cada añopor contacto con la Salmonella.
El doctor Christoph Berger, del Hospital PediátricoUniversitario de Zurich, Suiza, señaló que las personas con elsistema inmunológico comprometido y los niños pequeños y losbebés son las poblaciones más vulnerables.
Murphy y un colega revisaron las estadísticas de lasinfecciones por Salmonella en los menores de cinco años en elsudoeste de Reino Unido. Los autores se concentraron en elperíodo 2010-2013 y también analizaron las historias clínicaspara determinar si los niños habían estado expuestos a reptilescomo lagartijas o víboras, y si habían estado internados.
Cuarenta y ocho de los 175 casos estudiados habían tenidocontacto con reptiles y la mitad había quedado internado por lainfección, comparado con menos de un quinto de los niñosinfectados que no habían tenido contacto con esos animales.
Los niños con una infección asociada con la exposición areptiles tenían unos seis meses de edad, mientras que el restode los pacientes tenía un año en promedio.
En Archives of Diseases in Childhood, el equipo publica queexisten muchas cepas de Salmonella y que las que están asociadascon los reptiles suelen ser distintas a las que causan lasenfermedades de transmisión alimentaria, lo que explicaría elaumento de la gravedad de los síntomas.
Ocho de los 48 niños en contacto con reptiles desarrolló unainfección de la sangre, meningitis o colitis, comparado conapenas cuatro de los 127 niños que no habían estado expuestos aesos animales.
Berger recomendó el lavado de manos después de tocartortugas y otros reptiles, incluidos los menores de un año, "enlos que aumenta el riesgo de transmisión indirecta y enfermedadpor Salmonella (aunque el bebé no haya tenido contacto directocon el reptil)".
Murphy y su coautor señalan la importancia de que losmédicos conozcan esta relación entre las infecciones porSalmonella y el aumento de la cría de reptiles como mascotas enlos hogares. Murphy recomienda que los padres de niños pequeñosque tengan reptiles como mascotas reduzcan el acceso de esosanimales a las áreas que utilizan los niños.
Dijo, además, que los padres que estén interesados en esetipo de mascotas "esperen hasta que sus hijos pasen la etapa deexploración oral, empiecen a caminar y sean lo suficientementegrandes para lavarse las manos solos".
FUENTE: Archives of Diseases in Childhood, online 22 dediciembre del 2014.