
Las comparaciones no son odiosas, sino inevitables. La nueva generación de smartphones de Apple llegarán el próximo mes al mercado español y posiblemente miles de usuarios meditarán un posible cambio del dispositivo tecnológico más importante de sus vidas. En esa tesitura, conviene conocer las fortalezas y debilidades de cada marca para invertir el dinero de la mejor forma, en función de los gustos y necesidades de cada uno.
Además de Apple, el resto de los grandes fabricantes de móviles han presentado en las últimas semanas sus respectivos terminales de alta gama con los que pretenden disputar la batalla de los próximos otoño e invierno. Samsung, LG, Sony, Nokia, BlackBerry, Motorola y HTC han afinado sus respectivos terminales para integrar la mejor tecnología de cada casa en unos terminales icónicos cuyos precios oscilan entre los 350 y 800 euros. Por menos precio resulta casi imposible rivalizar en un segmento Premium.
La lista corta de los grandes móviles de la segunda mitad del año descubre que Android es el sistema operativo que manda en un negocio cada vez más dependiente de la plataforma de Google. De la decena de dispositivos de bandera elegidos para la comparativa adjunta (ver cuadro), aparecen siete smart- phones de Android frente a uno de Windows Phone (Lumia 1020) y otro de BlackBerry (Z30). Otras plataformas como Firefox, dirigidas a móviles de gama media y baja, quedan excluidas del escalafón de equipos de tope de gama.
Nuevas plataformas
No hay que perder de vista a Samsung, que ultima su apuesta por Tizen, tecnología que no se hará esperar en el segmento de telefonía móvil. Windows Phone tiene a Nokia como bandera, pero sin olvidarse de posibles colaboraciones puntuales, como las que podrían producirse con HTC o LG, entre otros. Blackberry se resiste a desaparecer del mapa, aferrándose una plataforma BB10 que deambula en tierra de nadie, en busca de un salvador que aporte nuevas esperanza a la vieja gloria canadiense. La reducción de su presupuesto en márketing lanza un mensaje de desánimo a una industria que ya apenas cuenta con BlackBerry.
Los principales rasgos de identidad de los móviles de alta gama se encuentran en las pantallas, procesadores y batería. Los fabricantes tienen claro que la pantalla es el gran escaparate de unos dispositivos cada vez más generosos en tamaño y resolución.
El consumo de contenidos audiovisuales en el smartphone (sin olvidarse de la televisión de pago) invita a los fabricantes a reducir los bordes de los dispositivos para ganar espacio para la pantalla. Asimismo, entre las 4,5 pulgadas del Lumia 1020 y las 5,5 pulgadas del LG3 y iPhone 6 Plus se enmarcan la practica totalidad de los móviles de alta gama más atractivos del mercado.
La batería es otro de los puntos fuertes de los smartphones de alta gama, en sintonía con la demanda de los usuarios. El pública demanda equipos con autonomía mínima de 24 horas con un uso normal, lo que requiere baterías de más de 1.500 MaH. La ecuación es complicada ya que las grandes pantallas elevan el consumo energético, lo que obliga a optimizar recursos por otros caminos. Los 3.100 MaH del Xperia Z3, los 3.000 MaH del LG G3 y los 2.800 Mhz del Samsung Galaxy S5 lideran el ránking de smartphones con mejores prestaciones técnicas para resistir el uso intensivo.
Tanto en duración de la batería como en rendimiento del procesador resulta complicado realizar comparaciones con el iPhone 6 Plus, ya que se trata de tecnologías diferentes. En calidad de pantalla, la resolución del buque insignia de Sony, el Xperia Z3, se perfila como referencia de un mercado al contar con la misma resolución que el iPhone 6 Plus, pero con una pantalla algo más pequeña que el móvil de Apple.
Cámaras superlativas
La importancia de las cámaras en los móviles crece de un año para otro. Ante esa demanda, los fabricante consideran que ya no basta con el mayor número de megapíxeles, sino que también se imponen ópticas y software a la altura de la fotografía semiprofesional. Los estabilizadores de imagen se han afinado de forma extraordinaria en los últimos años, así como los flashes y los sistemas de edición gráfica. HTC rescata la profundidad de campo, LG presume con su flash láser y Huawei con una cámara secundaria de alta calidad, para ofrecer los mejores selfies del mercado.