(Reuters) - Verizon Communications pretende reducir 1.700 puestos de trabajo, o casi un 1 por ciento de su plantilla, mediante un programa de bajas incentivadas orientado al departamento técnico y centros de llamadas.
Verizon, que ha estado tratando de reducir costes en su atribulado negocio de telefonía fija, dijo el lunes que si la cantidad de empleados que aceptan la propuesta es muy baja podría decidir unilateralmente los despidos.
La firma dijo que era demasiado pronto para estimar el impacto financiero del plan de adquisición, que fue anunciado a los trabajadores sindicados en varios lugares de Estados Unidos la semana pasada.
Verizon, que tiene alrededor de 192.000 trabajadores en total, ha estado en conversaciones durante meses con los sindicatos por los contratos de 45.000 empleados, o cerca de la mitad de la fuerza laboral de su negocio de telefonía fija.
Los trabajadores se declararon en huelga durante dos semanas en agosto del año pasado.
El portavoz sindical Richard Young dijo que las conversaciones estaban progresando pero se negó a ofrecer más detalles.
La compañía dijo que busca alcanzar salidas pactadas a causa de un "excedente de mano de obra" en ciertas partes de su negocio de telefonía fija.
Las acciones de la compañía subían un 0,6 por ciento a 41,26 dólares el lunes por la mañana en la Bolsa de Nueva York.
