Barcelona, 22 jul (EFE).- El presidente de la Generalitat, Artur Mas, el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, y la Fira de Barcelona se han mostrado eufóricos por la designación de la capital catalana como sede del Mobile World Congress, congreso de telefonía móvil, que aportará a la ciudad 3.500 millones de euros hasta 2018.
Después de saberse que la ciudad de Barcelona ha renovado la confianza para volver a organizar entre 2013 y 2018 el Mobile World Congress, Mas, Trias y el presidente de la Fira, Josep Lluís Bonet, han comparecido en la Galería Gótica del Palau de la Generalitat para felicitarse por esta "extraordinaria" noticia.
Mas ha afirmado que la designación de Barcelona debe servir para inyectar una buena dosis de "moral colectiva" al país y para poner de manifiesto ante aquella "gente que se pueda sentir desencantada" con la crisis que golpea a Cataluña que, "si se trabaja juntos y bien, los éxitos llegan", aunque eso requiere "esfuerzos previos".
El presidente catalán ha querido destacar el trabajo de su antecesor en el cargo, el socialista José Montilla, así como del exalcalde barcelonés Jordi Hereu, de Xavier Trias, del Ministerio de Industria, de Fira de Barcelona, de la Cámara de Comercio de Barcelona y de Turismo de Barcelona.
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