WASHINGTON (Reuters) - Los científicos han subestimado la posibilidad de que se produzca un gigantesco terremoto y tsunami que podría inundar buena parte del noroeste de Estados Unidos y las costas del oeste de Canadá, informaron el lunes investigadores británicos y estadounidenses.
La evidencia geológica sugiere que en el pasado hubo terremotos más fuertes que el seísmo de magnitud 9,2 - el segundo más potente registrado - que causó un tsunami con olas de hasta 12 metros de altura en el Golfo de Alaska en 1964, precisaron.
"Nuestra información indica que dos grandes terremotos sacudieron Alaska durante los últimos 1.500 años y nuestros descubrimientos muestran que es posible que tenga lugar un terremoto de mayor intensidad y un maremoto más destructivo que el de 1964", dijo Ian Shennan, que dirigió el estudio.
"La región ha sido azotada por grandes terremotos y tsunamis individuales y las pruebas indican que pueden ocurrir rupturas múltiples y más extensivas", agregó a través de un comunicado Shennan, profesor de geografía de la universidad británica de Durham.
Para su estudio, los equipos de Durham, la Universidad de Utah y la consultora Plafker Geohazard estudiaron muestras del subsuelo y sedimentos de la costa de Alaska y encontraron pruebas de desastres de mayor envergadura hace 900 y 1.500 años.
En un artículo publicado en la revista Quaternary Science Reviews, relataron que la geología subyacente de la región muestra que es posible un poderoso y masivo terremoto.
"El tsunami de 1964 se propagó en dirección sur a través de la costa de la Columbia Británica, Washington, Oregon y hacia el norte de California", declaró en un comunicado el geólogo Ron Bruhn, de la Universidad de Utah.
"Nuestro trabajo sugiere que el extremo noreste del megaseísmo aleutiano tiene una mayor magnitud de terremoto y potencial de maremoto de lo que se pensaba anteriormente", agregó.
En la costa oeste de Estados Unidos y alrededor de Hawai existen sistemas de alerta de tsunamis y los expertos están trabajando para modernizarlos, después de que un temblor en las costas de Indonesia en 2004 generara un gigantesco maremoto que causó la muerte de 230.000 personas y devastó las costas asiáticas, desde Tailandia a Sri Lanka.
