BERLÍN (Reuters) - La canciller alemana, Angela Merkel, dijo el lunes que los políticos deberían considerar si ayudan al atribulado fabricante de procesadores Qimonda y al resto de este sector en Alemania.
"Con Qimonda, los políticos están definitivamente llamados (a actuar), en conjunción con AMD, Qimonda, Infineon - todos estos son casos difíciles, y éste es el único grupo de fabricantes de chips en Europa - quizá para cuidar de ellos de una forma que permita su supervivencia", dijo en una conferencia de la industria alemana.
El estado alemán de Sajonia, apodado "Silicon Saxony", ha animado a empresas de tecnología como AMD e Infineon a invertir allí.
Infineon, el mayor proveedor de Europa de procesadores para automóvil, está acusando el colapso del mercado automovilístico y las reducciones de inventarios en la cadena de suministro electrónico, y se ha visto expuesto por su insolvente unidad de procesadores de memoria, Qimonda.
En una entrevista con la revista alemana Capital, el consejero delegado de Infineon, Peter Bauer, declinó discutir las perspectivas de ayudas del estado alemán, pero señaló que la empresa no sufre graves problemas financieros.
"Al terminar marzo teníamos 665 millones de euros líquidos y ahora tenemos un poco más porque colocamos con éxito un bono convertible", se le citó.
La situación está bajo control a nivel operativo a pesar de una fuerte caída en las pérdidas, añadió, señalando que ahora la empresa podría obtener beneficios si genera ventas de unos 850 millones de euros.
Además, indicó, su negocio de teléfonos móviles está a un paso de la rentabilidad.