El presidente Barack Obama se reunió el pasado jueves con un comité de cinco miembros que designó para revisar los problemas de privacidad involucrados en los programas de vigilancia de Estados Unidos, según ha confirmado la Casa Blanca, parte de un esfuerzo por recuperar la confianza tras las filtraciones del exagente de la NSA Edward Snowden.
WASHINGTON, 28 (Reuters/EP)
Obama se ha enfrentado a duras críticas desde que Snowden, un miembro de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA), expuso a periodistas información secreta sobre programas de vigilancia de Estados Unidos a través de llamadas telefónicas y correos electrónicos, generando preocupaciones sobre violaciones a la privacidad y las libertades civiles.
El comité de revisión es parte de un esfuerzo por ampliar la supervisión de los programas, que Obama ha defendido como una parte necesaria de las actividades para proteger la seguridad nacional.
Sus miembros son Richard Clarke, un exasesor de política antiterrorista de los gobiernos de Clinton y Bush; Michael Morell, un exvicedirector de la CIA; Peter Swire, quien trabajó en temas de tecnología en los gobiernos de Clinton y Obama.
Participan también Geoffrey Stone, un profesor de derecho constitucional de la Universidad de Chicago, donde Obama trabajó antes de entrar a la política; y Cass Sunstein, el exjefe regulador de Obama y quien está casado con Samantha Power, la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas.
El grupo presentará sus hallazgos iniciales en 60 días al director de inteligencia nacional, según la Casa Blanca. Se espera que ellos entreguen un informe final y recomendaciones a Obama antes de fin de año.
Anteriormente este mes, Obama también dijo que trabajaría con el Congreso para reformar las leyes que rigen la recolección de registros telefónicos y agregar más supervisiones a la Corte de Vigilancia de Inteligencia Internacional. También aseguró que quería entregar más información al público sobre los programas de vigilancia para restaurar la confianza.