
Microsoft ha retrasado el lanzamiento de su consola Xbox One en China, cuya presentación estaba prevista inicialmente para mañana martes.
La mayor empresa de software del mundo no dio motivos para el retraso en un comunicado emitido ayer.
El retraso es el último de varios reveses de Microsoft en China, donde también está siendo investigada por supuestas violaciones de competencia en relación al sistema operativo Windows y al conjunto de programas Microsoft Office.
El Gobierno chino levantó este año una prohibición sobre las videoconsolas de 2000. Microsoft ha buscado un acuerdo con la empresa china fabricante de decodificadores de televisión por Internet BesTV New Media para crear una empresa conjunta para fabricar las consolas en Shanghái.
La consola Xbox One costará 3.699 yuanes (unos 470 euros) sin el sistema de detección de movimiento Kinect, dijo Microsoft en julio.
Actualmente China es el tercer mayor mercado de videojuegos. Las ventas del sector subieron más de un tercio respecto a 2012 a casi 14.000 millones de dólares el pasado año. Pero la piratería y el dominio de los juegos para ordenadores personales y móviles puede llevar a un escaso margen para el mercado de las consolas.