
Los usuarios están reaccionando ante la confirmación de que la Xbox One tendrá bloqueo por región y otras informaciones no definitivas, como que restringiría el préstamo de videojuegos o la segunda mano mediante un código de activación único para cada consola. De esta forma, los usuarios están usando las redes sociales para pedir a Sony que la PlayStation 4 no tenga esas limitaciones.
Desde que se dio a conocer la nueva consola de Microsoft poco a poco han ido surgiendo pistas sobre su política de juegos. En su presentación la compañía no mencionó desde el pago de un canon por utilizar juegos de segunda mano, algo que ha causado indignación entre los usuarios, hasta el bloqueo por región de la consola, que era bastante previsible.
Antes de la presentación de PlayStation 4, también se especuló con que podría llevar un tipo de protección para que el uso de los videojuegos estuviera limitado a una consola. Sin embargo, Sony no ha dicho nada a este respecto. Por eso, tras las primeras noticias relacionadas con este asunto en Xbox One, la comunidad de jugadores ha empezado a reaccionar para enviar un mensaje a Sony.
El DRM (Digital Rights Management), o gestión de derechos digitales, es un término que se refiere a las tecnologías de control de acceso usadas por editoriales y propietarios de derechos de autor para limitar el uso de medios o dispositivos digitales. Los jugadores no quieren restricciones relacionadas con los discos físicos que adquieren para su colección y por ello y viendo el camino que sigue la nueva consola de Microsoft, intentan que Sony no tome ejemplo.
La campaña se ha iniciador en Twitter y cualquier puede unirse usando los hadhtags #PS4NoDRM o #PS4UsedGames. Los usuarios nombran hasta a grandes directivos de la compañía como Shuhei Yoshida, presidente de Sony Worldwide Studios, pidiéndole que la PlayStation 4 no lleve este tipo de características restrictivas.
Básicamente lo que los usuarios piden es que la nueva PlayStation no lleve DRM, que permita el uso libre de juegos de segunda mano, y, de paso, que se mantenga la posibilidad de jugar de manera online gratuita, como se hacía hasta el momento. Otro temor que está empezando a aflorar es que PSN empiece a tener cuotas de pago, como ocurre en Xbox Live.
Los ejecutivos de Sony no han dado una respuesta clara pero sí que se han molestado en contestar a las peticiones con un tuit que ha escrito el miembro del equipo SCEA ISD Nick Accordino: "Nos encanta el entusiasmo de los fans de PlayStation. Sepan que en Sony los escuchamos con mucha atención".
Resultaría extraño que Sony ofreciera respuesta definitivas en este sentido antes de su rueda de prensa del 10 de junio en el E3 de Los Ángeles. Habrá que esperar, pues, a la feria de videojuegos más importante del mundo. Allí Sony debería pronunciarse a este respecto y Microsoft debería dar una respuesta definitiva a un asunto que no está gustando demasiado a la comunidad de usuarios.