
Jack Dorsey ha convertido los mensajes cortos en algo grande. Es el hombre que fundó Twitter, la red social online que permite enviar gratis mensajes de hasta 140 caracteres (los que tiene esta frase). 500 millones de personas utilizan este fenómeno social lanzado en 2007, en el que ya se han anunciado 2.000 empresas.
Según la consultora eMarketer, los ingresos de la compañía podrían rondar los 200 millones de euros este año, prácticamente el doble que en 2011. Y Forbes estima la fortuna de Dorsey en 500 millones de euros. Para él, lo mejor de todo es que su invento le permite comunicarse con su madre, Marcia, aunque vivan lejos (él en San Francisco; ella, en Missouri).
Hace dos décadas que a Dorsey (que en noviembre cumplirá los 36) se le ocurrió lo que sería el germen de Twitter. Aquel joven nacido en Saint Louis (Missouri), que estaba fascinado por la programación informática, se propuso diseñar una especie de mapa interactivo de su ciudad. En él incluyó los movimientos, al minuto, de coches de policía y ambulancias (a los que accedió a través de bases de datos públicas), y creó un programa que, además, permitía a los ocupantes de dichos vehículos informar de sus actividades. Alguno de sus programas todavía es utilizado por compañías de taxi.
Era sólo el principio: después, hacia el año 2000, quiso desarrollar un sistema similar para comunicarse con sus amigos ("quería llevármelos en el bolsillo, por así decirlo", ha comentado). Y después pensó: ¿por qué no expandirlo a todo el mundo? En su cabeza, dos aspectos fundamentales: la inmediatez de los mensajes y la accesibilidad del servicio. Es decir, quería que cualquier persona con una conexión a Internet pudiese utilizarlo.
Planteó su idea a Odeo, la empresa para la que trabajaba, y en dos semanas construyó el prototipo de Twitter. Corría marzo de 2006. El proyecto gustó a la compañía y llamó la atención de un inversor. En abril de 2007, Twitter dejó de ser un proyecto de Odeo para nacer como Twitter Inc. Dorsey no se quedó ahí, y también ha fundado Square, una compañía que ofrece servicios de pago a través del móvil.
Hoy, cerca de dos millones de personas siguen sus comentarios en Twitter. El pasado 21 de marzo, la compañía cumplía seis años y su fundador lo recordaba a través de su cuenta en la red social: "Son las 12.50. Feliz sexto cumpleaños, Twitter. Hemos pasado de un tuit a cerca de mil millones cada tres días. Estoy muy orgulloso de nuestros usuarios y de nuestro equipo".
Poco se sabe de su vida personal, excepto lo que deja entrever en sus tuits: sus viajes a su casa familiar en Saint Louis, sus rincones preferidos de San Francisco y algún encuentro de Estado: en lo que va de año, se ha reunido con la canciller Angela Merkel y con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, para hablarles de las bondades de su invento