La compañía surcoreana Samsung ha presentado este lunes su nuevo Galaxy A7, uno de los smartphones más finos de la familia Galaxy, pensado para tener una "experiencia social superior".
El Galaxy A7 cuenta con una pantalla HD super AMOLED de 5,5 pulgadas, con una cámara principal de 13 megapíxeles con autoenfoque y flash LED, y una frontal de 5 megapíxeles, con dos nuevos modos: Ultra Wide Shot y Auto Selfie.
El nuevo dispositivo tendrá dos procesadores, que variarán según la versión: la variante LTE contará con dos procesadores, uno de cuatro núcleos a 1,8 GHZ y otro de cuatro núcleos a 1,3 GHz, mientras que la variante LTE/3G dualSIM incorporará también dos procesadores de cuatro núcleos, a 1,5 GHz y a 1,0 GHz.
Asimismo, el smartphone cuenta con 2 GB de RAM, memoria interna de 16 GB, ampliables hasta los 64 GB mediante una tarjeta microSD, batería de 2.600 mAh, e integra, entre otros sensores, acelerómetro, sensor de proximidad y sensor geomagnético.
El diseño del Galaxy A7 se basa en un cuerpo metálico unibody, con unas dimensiones de 151 x 76,2 x 6,3 milímetros y un peso de 141 gramos, y funciona con el sistema operativo Android 4.4 KitKat.
"Una experiencia social superior"
El smartphone ha sido diseñado para tener una "experiencia social superior", como ha explicado la compañía en el blog Samsung Tomorrow. Está disponible en tres colores: blanco, negro y dorado.
"Nos esforzamos por desarrollar dispositivos que sean atractivos para un amplio rango de consumidores y nos adelantamos a la próxima gran tendencia social", ha comentado el CEO y responsable de IT & Mobile Communicationes en Samsung Electronics, JK Shin. "Combinando tanto un impresionante diseño metálico y un poderoso desempeño, el Galaxy A7 es estiloso mientras distribuye una experiencia de usuario superior".
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