
El pasado 24 de enero se cumplieron 30 años de la salida al mercado del Macintosh, y por ende, del nacimiento de la historia moderna de Apple.
Aunque Apple le rindió homenaje al pionero equipo con una web especializada y un vídeo, Apple ha mostrado hoy un anuncio para demostrar cómo la compañía ha revolucionado el mundo con sus productos.
Para hacerlo, y conseguir mayor impacto, la compañía lo grabó íntegramente ese mismo día "desde el amanecer en Melbourne hasta el anochecer de Los Ángeles" y todo a través de 100 teléfonos iPhones repartidos por todo el mundo.
En concreto, la compañía ha explicado que el anuncio se grabó en Melbourne, Tokio, Shanghái, Botsuana, Pompeya, Amsterdam, Lyon, París, Londres, Puerto Rico, y en las localidades norteamericanas de Brookhaven, Maryland, Aspen y Seattle, y Los Ángeles, que también sirvió de centro de montaje, ya que cada vídeo grabado en cada parte del mundo era mandado en tiempo real gracias a conexión ultrarrápida.
En estos 15 lugares los cámaras de Apple se encargaron de recoger el testimonio de un total de 45 historias, como la de un periodista en Puerto Rico, unos niños haciendo música en París o un padre que usaba su iPod para regular la intensidad de sus prótesis que le permiten romper un huevo.
¿Por qué con iPhone?
La elección del teléfono como método para grabar la compañía lo justifica más allá de que sea la cámara más usada del mundo, sino porque viendo lo que se ha grabado se demuestra el potencial del gadget que miles de personas usan a diario.
Aunque la compañía reconoce que probaron a hacer el anuncio con otros dispositivos, finalmente se grabó integramente con el iPhone 5S, pues se "conseguían unos estándares de grabación muy altos" que pedía el director Jake Scott, quien reconoció que "hay una sensación de liberación al ser capaz de contar estas historias con este dispositivo, explorarlo e investigarlo, para ver lo que el iPhone es capaz de hacer, y a partir de ahí estirar".