Nokia ha presentado cuatro nuevos teléfonos en el Mobile World Congress (MWC) de Barcelona con la clara intención de expandirse por los países en vías de desarrollo gracias a su bajo precio.
El más asequible de ellos es el Nokia 105, que viene a sustituir el 1280, costará 15 euros y cuenta con "pantalla a color brillante", reloj despertador, radio FM, linterna, teclado a prueba de polvo y salpicaduras y una batería de 35 días. Estará disponible en negro y cian, y se lanzará en China, India, Indonesia, Nigeria y Rusia en primer lugar, aunque más tarde también llegará al resto de Asia y a países europeos.
También ha presentado el smartphone Nokia 301 con un precio de 65 euros y que llegará en el segundo trimestre en 120 países. Tiene teclado físico, espacio para SIM dual, pantalla de 2,4 pulgadas y cámara de 3.2 megapixels con una resolución de 2048x1536 pixels. Además, el teléfono cuenta con la opción panorama, fotos en secuencia y autorretratos con control por voz.
Algo más elevado de precio, la finlandesa ha presentado dos nuevos smartphones de la gama Lumia, el 520 y el 720, por 139 y 249 euros.
El Lumia 520 es el smartphone de gama media más barato de la compañía y cuenta con una pantalla de 4 pulgadas, procesador de 1 Ghz, 512 de RAM, 8 GB de memoria interna y cámara de 5 megapixels. Por su parte, el 720 cuenta con una pantalla algo más grande (4,3 pulgadas), también tendrá 1 Ghz, 512 de RAM y 8 GB de memoria, aunque su cámara es de 6,7 megapixels.
