
La firma de moda de autor Adolfo Domínguez da un paso más en su apuesta por sus raíces. Tras el éxito de la colección Galicia, un conjunto de colecciones de mujer inspiradas en el territorio gallego, la primera que pertenece al 100% a la etapa liderada por la consejera delegada Adriana Domínguez; la firma ha lanzado la segunda colección ideada bajo esta inspiración pero se centra en el concepto gender fluid que desmarca las prendas de la categorización de género. ¿Y qué mejor forma de demostrar este compromiso? Eligiendo Ourense y sus ciudadanos como el lugar más adecuado para presentar su último desfile, el primero desde su última aparición en la Pasarela Cibeles de 2011.
Galicia está muy asociado a la calidad de los productos de la tierra y la gastronomía, dónde se come mejor que en esta tierra. Sin embargo, los que conocen bien esta región de España saben que el compromiso por la excelencia se extiende al trato social, a la artesanía o a la moda. Así, para este último desfile, Adolfo Domínguez planteó una versión más enraizada en sus orígenes a pie de calle: personas de todas las edades y tallas (modelos no profesionales) fueron seleccionadas para mostrar la colección otoño-invierno 2019/20 por las calles de Ourense. "En el sector textil, estamos obligados a transformarnos constantemente, pero hay algo que para las marcas de moda de autor nunca cambia: nuestra esencia, nuestro origen. El lugar tenía que ser Galicia y el sitio, Ourense", explica a Status Adriana Domínguez, consejera delegada de Adolfo Domínguez.
Así, la pasarela se concibió como una performance integrada en la vida de la ciudad, combinando valores culturales con moda. El desfile recorrió 200 metros de las calles de Ourense, desde la Praza de San Martiño, siguiendo por la Rúa das Tendas, Praza Maior y Rúa Arcedianos para finalizar de nuevo en la Praza de San Martiño. Además, el espectáculo estuvo un grupo de pandereteiras y perfomances musicales y artísicas. Esta apuesta por Galicia no es nueva, ya fue la inspiración de la nueva era de Adolfo Domínguez en la colección 2018/19, con subcolecciones como Toxo, Fento o Cíes que lograron incrementar en un 6,4% las ventas comparables de la colección de mujer de la compañía en 22 países.
La nueva colección
La nueva propuesta, que ya está a la venta, esta desarrollada alrededor del concepto del gender fluid o la no identificación de género. Por ello, incluye algunas prendas que pueden ser utilizadas tanto por hombres como por mujeres. Así, destacaron las piezas de líneas puras, de carácter oversize y caídas con personalidad. Elementos que crean combinaciones cómodas, de fondo de armario pero sin perder sofisticación. En cuanto a materiales, destacan el algodón, la lana y otros tejidos naturales. Y en cuenta a el color, Adolfo Dominguez se abona a las tonalidades clásicas, como el blanco, el azul marino, gris o camel, que combina en formato total look, lo que asegura una mayor elegancia. No obstante, en el apartado estrictamente femenino se encuentran vestidos con estampados en tonos pastel, en dibujos más eclécticos o directamente en lentejuela.

La tendencia clara que se ve en la colección de Adolfo Domínguez es la fluidez y la comodidad. Los vestidos túnica, con libertad en la cintura, y los abrigos oversize con hombros caídos visten a la mujer Domínguez. Aunque también tiene opciones igual de cómodas pero marcadas con cinturón. Mientras, el hombre encuentra su aliado en las chaquetas y abrigos amplios y el jersey de punto, cuello redondo o cisne, que puede sustituir sin complejos a la estructurada y a veces incómoda camisa.
Tras más de 40 años en el mercado, Adolfo Domínguez es una de las firmas de moda de autor de referencia a nivel mundial. En su último ejercicio completo Adolfo Domínguez facturó 111,9 millones de euros. La empresa cuenta 387 puntos de venta en 22 países y emplea a más de 1.100 profesionales.