Barcelona, 17 ago (EFE).- La consellera de Acción Social, Carme Capdevila, ha salido hoy en apoyo de la Ley de Acogida, que el Defensor del Pueblo recurrirá ante el Constitucional, y ha argumentado que los inmigrantes que empiezan por aprender el catalán acaban dominando el castellano, lo que no siempre ocurre al revés.
El Defensor del Pueblo, cargo que desde julio ocupa en funciones María Luisa Cava, recurrirá ante el Tribunal Constitucional la Ley de Acogida aprobada por el Parlament de Catalunya el pasado mes de abril, según desveló ayer a Efe el diputado del grupo mixto José Domingo.
Domingo, en su condición de presidente de Impulso Ciudadano, trasladó en mayo pasado el texto aprobado en el Parlament al Defensor del Pueblo, cuando este cargo aún lo ostentaba Enrique Múgica, al entender que la normativa anteponía en el proceso de aprendizaje para los extranjeros empadronados en Cataluña la enseñanza del catalán al castellano.
En un comunicado, la consellera Capdevila ha rechazado hoy la interposición del recurso por parte del Defensor del Pueblo, ya que, según ha recordado, la normativa aprobada por el Parlament en abril pasado, a la que sólo se opusieron PP y Ciutadans, cuenta con el aval unánime del Consejo de Garantías Estatutarias.
Según la consellera, la normativa establece el catalán como lengua vehicular de la formación porque, entre otros motivos, se ha demostrado que cuando un inmigrante empieza por aprender el castellano no siempre acaba conociendo el catalán, mientras que, en cambio, cuando se empieza por aprender el catalán se acaban conociendo ambas lenguas.
Para Capdevila, el espíritu y los objetivos explícitos de la normativa son promover la autonomía y la igualdad de oportunidades de los inmigrantes, así como combatir los obstáculos que impiden su integración, como la falta de conocimiento de la lengua y el desconocimiento de la sociedad de acogida, el mercado de trabajo y su legislación.
Por ello, Capdevila considera que la Ley era "necesaria y urgente" para promover la cohesión social y la igualdad de oportunidades de todas las personas que viven en Cataluña.
Por contra, José Domingo sostiene que la gran movilidad por todo el territorio español del colectivo de inmigrantes provoca que dar prioridad a la enseñanza del catalán sobre el castellano puede ir en contra de sus intereses.