
Las prostitutas de la calle Montera, en Madrid, aseguran que su situación no es similar a la del mercado barcelonés de La Boquería porque ellas no tienen "tanta cara" para realizar "los servicios en plena calle", delante de otras personas.
En declaraciones a Europa Press TV, una joven rumana argumenta que se encuentran "en pleno centro de Madrid", por lo que según ella "no se puede" atender a los clientes en esa calle, sino que se trasladan a locales cercanos. "No creo que una chica tenga tanta cara como para hacer un servicio con un cliente delante de otra gente", advierte María.
La joven recuerda que "la comisaría está aquí cerquita" y con "tanta gente que pasa" en esta céntrica calle madrileña, es imposible que se repitan escenas similares a las del mercado barcelonés de La Boquería, donde clientes y prostitutas practicaban sexo en la calle.
Polémica situación
"Nunca hacemos los servicios en la calle", confirma María, otra prostituta rumana con el mismo nombre de su compañera. Ella afirma que, tras la polémica por la situación en el mercado barcelonés, no han visto ningún cambio y "está todo tranquilo".
Ambas prostitutas creen que es posible una buena convivencia con el resto del barrio, y reclaman que les "dejen en paz" porque no "molestamos tanto". Una de ellas defiende su trabajo en la calle porque "las chicas se comportan bien", "con educación". Aunque al mismo tiempo reconoce que "hay vecinos que se molestan" cuando les ven en los portales de esta concurrida calle madrileña.
Su compañera añade que, aunque ellas son "muy tranquilas", algunos vecinos les expresan su malestar por captar clientes en la calle. "Hay chicas que están muy tranquilas en un portero de por aquí, y los vecinos bajan y comienzan el escándalo. ¿Por qué, no lo sé?, no les gusta vernos por aquí", admitió la prostituta rumana.