Aunque la fortuna del segundo hombre más rico del mundo, Amancio Ortega, se fraguó en el sector textil, como es bien sabido, el creador de Inditex ha encontrado en el 'ladrillo' una mina de oro para sus inversiones. Empeñado en convertirse en el casero de todos, no hay edificio en venta en cualquier país de la tierra que se le resista en caso de que le interese. La colección de sus emblemáticas adquisiciones es amplia y repasar algunas de las más notables da vértigo.
Pontegadea es la inmobiliaria a través de la cual suele operar Ortega y que no sólo compra, sino que gestiona y reforma los edificios que adquiere, edificios que siempre tienen un denominador común: estar ubicados en las zonas comerciales más exclusivas de ciudades importantes. Repasando en un listado alguna de sus compras más espectaculares, es fácil hacerse una idea del potencial del brazo inversor del dueño de Inditex.
Edificio Haughwout
Situado en el 'soho' de Nueva York, el edificio de 4.500 metros cuadrados y que contó con el primer ascensor de Manhattan, se ha convertido en la última compra de Amancio Ortega, quien habría pagado 133 millones de euros por esta joya del siglo XIX.
En enero, Ortega ya compró otro edificio en el 'soho' neoyorquino, 4.400 metros cuadrados en la calle Broadway. Allí abrirá la nueva tienda de Zara en la ciudad. Su coste, unos 258 millones de euros (280 millones de dólares)
Manzana en Lincoln Road, Miami
En septiembre, a cambio de 323 millones de euros el magnate gallego adquirió toda una manzana en la llamada 'Quinta Avenida' de Miami, en Lincoln Road, corazón de Miami Beach.
Esquire Theatre, Chicago
El empresario español se hizo en marzo de este año con el Esquire Theatre de Chicago, situado en el principal distrito comercial de la ciudad, a cambio de unos 162 millones de euros (176 millones de dólares).
Edificio en Oxford Street
Londres ha sido hasta el momento la ciudad preferida de Ortega para invertir en inmuebles, hasta el punto de que es el principal inversor en una calle tan exclusiva como Oxford Street, en la que en abril pagó 550 millones de euros por un edificio de 20.000 metros cuadrados, conocido como Oriana y situado en la confluencia con Tottenham Court Road. En Oxford Street, Ortega ya poseía otros tres inmuebles. También en la City londinense posee varios inmuebles.
Devonshire House, Londres
Otra de las grandes adquisiciones del empresario en la capital británica la realizó en 2014, cuando se hizo con Devonshire House por 477 millones de euros: 16.000 metros cuadrados, cercanos al palacio de Buckingham, en Piccadilly Street, reconvertidos en oficinas y comercios.
La sede de Rio Tinto, Londres
En diciembre de 2014, la adquisición de la sede de Rio Tinto en Londres fue otra de las sonadas compras de Pontegadea. Su precio, 400 millones de euros por 11.000 metros cuadrados situados en St James Street.
Gran Vía 32, Madrid
Ortega estrenó 2015 comprando el número 32 de la Gran Vía madrileña, antigua sede del Grupo Prisa y actual casa de uno de sus competidores textiles, la irlandesa Primark, grupo que ha instalado allí una de sus tiendas emblema en el mundo. Pagó 400 millones de euros por un edificio de 1924 y 36.376 metros cuadrados, propiedad del grupo inversor Drago Capital.
Torre Picasso, Madrid
En el año 2012, Ortega se hizo con un símbolo de Madrid, la Torre Picasso del Paseo de la Castellana. Por ella pagó otros 400 millones de euros a FCC.
Renaissance Plaza, Toronto
El apetito inversor de Amancio Ortega ha llegado también a lugares menos mediáticos pero estratégicos en clave comercial. Tal es el caso de la canadiense Toronto, donde en 2014 gastó 226 millones de dólares por el edificio Renaissance Plaza.
Sede del BBVA, Barcelona
Barcelona es otra de las ciudades predilectas de Amancio Ortega, si bien sus adquisiciones no han alcanzado precios tan altos como las realizadas en otros emplazamientos. En cualquier caso, sonada fue la compra en 2013 de la sede del BBVA, en plaza Catalunya, por la que pagó 100 millones de euros al fondo alemán Deka.
Un año después, aprovechando las 'rebajas, adquirió en la misma emblemática plaza barcelonesa, lindando con el Paseo de Gràcia, la antigua sede de Banesto, por la que desembolsó 44 millones. En medio kilómetro posee cuatro edificios, puesto que también es dueño de la sede del Santander en el número 5 de Paseo de Gràcia y de los números 16, 56 y 93 de la misma vía.
Ortega comenzó a adquirir inmuebles como negocio en el año 2007. Aquel año fueron 10 los edificios comprados al Grupo Santander por valor de 458 millones de euros. Un año más tarde se agenció 40 propiedades más; el vendedor, Caixa Galicia. A partir de entonces, su actividad se disparó, España se le quedó pequeña y el mundo pasó a ser su particular tablero de 'Monopoly' en el que operar.