Se espera de forma generalizada que S&P y Fitch rebajen la calificación crediticia de Rusia en la próxima o próximas dos semanas, pero el mercado ya ha incluido en los precios esos riesgos, lo que sugiere una débil reacción de aquí en adelante. Si los precios del petróleo siguen bajando, es probable que veamos nuevas rebajas de rating este año, pero el balance del gobierno ruso todavía parece saludable; un impago soberano sería una decisión política más que económica.
Por Mert Yildiz.