El ajustado "no" de Escocia a la independencia evita que el Reino Unido se precipite por una resbaladiza pendiente de crisis constitucional, bancaria y monetaria. Este hecho debería reforzar la confianza de los inversores y hacer que la trayectoria de recuperación del Reino Unido se mantenga encaminada.
Seguimos esperando que la libra se fortalezca, y que el Banco de Inglaterra inicie la subida de sus tipos de interés oficiales en el mes de febrero.
Por Brunello Rosa